El proyecto del mayor almacén submarino de gas de España que está previsto construir frente a la costa del delta del Ebro se ha topado con un fuerte rechazo por parte de dos de los ayuntamientos más afectados, Alcanar (Tarragona) y Vinaroz (Castellón), justo cuando la empresa Escal UGS, filial de la canadiense Eurogas, ha solicitado al Ministerio de Industria la concesión para explotar la infraestructura.
El denominado proyecto Castor prevé aprovechar el antiguo pozo petrolífero de Amposta como reserva con capacidad para unos 1,9 millones de metros cúbicos de gas que abastecería el tramo de litoral comprendido entre Barcelona y Valencia. La inversión prevista ronda los 800 millones de euros. La solicitud, así como la declaración de utilidad pública, están en fase de información pública y el plazo de alegaciones concluye el lunes.
La empresa ya ha adjudicado el proyecto del diseño de la instalación y busca aprovechar el sellado natural que proporciona el terreno calizo del yacimiento petrolífero. Este fue explotado por Shell entre 1975 y 1989 y se extrajeron 56 millones de barriles de petróleo. Hace tres años se realizaron los sondeos para la viabilidad del proyecto, que incluye más de 30 kilómetros de canalizaciones desde un almacén en la costa hasta una planta de tratamiento en Vinaroz, a solo 1,5 kilómetros del municipio de Alcanar.
Escal UGS confía en obtener la concesión la próxima primavera y mientras tramita la declaración de impacto ambiental, que deben aprobar el Ministerio de Industria y las consejerías de Industria y de Infraestructuras de la Generalitat valenciana, con el fin de poner en funcionamiento la instalación antes del 2010. Sus estudios calculan que el pozo de Amposta podría acumular suficiente gas como para cubrir la demanda española en caso de emergencia durante 40 días.
El Gobierno aprobó en marzo del 2006 la revisión del Plan Energético 2005-2011, que considera "urgente" el desarrollo de cinco proyectos de almacenamiento subterráneo de gas para garantizar el suministro del sistema energético y modular posibles desequilibrios entre oferta y demanda. Incluye, además del proyecto Castor, la transformación de los antiguos yacimientos de gas de Marismas y Poseidón (Andalucía), la habilitación del de Yela (Guadalajara), y la duplicación del almacén de Gaviota (Vizcaya). Este y el de Serrablo (Huesca) son los únicos almacenes subterráneos operativos hoy.
LOCALIDADES AFECTADAS Los ayuntamientos de Vinaroz y Alcanar se han expresado en contra del proyecto Castor. Un pleno extraordinario del ayuntamiento tarraconense lo rechazó el pasado viernes.
Alfons Montserrat (ERC), alcalde de Alcanar, dijo que comprendía la necesidad del proyecto así, pero advirtió: "La solución tiene que ser compatible con el desarrollo de nuestra población, y el proyecto es lesivo". Sostiene que la torre de 50 metros y las dos chimeneas de 60 metros afectarán al turismo. También denuncia "riesgos de seguridad y para la salud". El pleno exige que Alcanar y el Gobierno catalán sean considerados parte afectada para poder emitir informes. Además, Alcanar contratará un gabinete jurídico.
