La junta de gobierno del Ayuntamiento de Priego ha dado luz verde a la unión de la calle Fuenclara con la Unidad de Ejecución (UE) 28 mediante una vía abierta al tráfico rodado y no con un tramo de escaleras como estaba previsto en el proyecto aprobado inicialmente en el 2010. De esta manera se zanja una polémica que ha tenido en vilo, de manera particular, a los residentes en la calle Fuenclara, uno de cuyos tramos, debido al desnivel existente con los terrenos anexos, carecía de salida desde que en la década de los años setenta del pasado siglo se urbanizó esta zona del barrio de San Cristóbal. Vecinos iniciaron en el mes de marzo una serie de actuaciones con la intención de evitar que su calle contara con una barrera arquitectónica.

Este proyecto de urbanización de la UE 28, "desde un primer momento contemplaba la conexión con la calle Fuenclara mediante un tramo de escaleras, similar al existente en otras vías aledañas", según dijo la alcaldesa de Priego, María Luisa Ceballos. Por ello, afirmó que jurídicamente era difícil de modificar "si no existía un acto de voluntad por parte de los propietarios".

En este sentido, la alcaldesa prieguense hacía referencia al papel mediador que ha desempeñado el Consistorio, "con el fin de no grabar los intereses de los propietarios de la UE 28 y, por otro lado, de los vecinos de la calle Fuenclara, que solicitaban que no volviese a cerrarse esta vía con unas escaleras, por los inconvenientes que ello suponía".

Para lograr este resultado, como añadía María Luisa Ceballos, "ha sido necesaria la realización de numerosos estudios, documentos e informes" que, finalmente, han dado como resultado que la conexión entre ambas zonas se realice mediante una calle que, pese al porcentaje de pendiente resultante (un 19%), es viable y apta para el tránsito de todo tipo de vehículos y peatones. De esta manera, la unión de la calle Fuenclara con la prolongación de Félix Rodríguez de la Fuente, posibilitará la conexión del barrio de La Inmaculada y el futuro Plan Parcial S-1 del Camino de los Silos --en el que está prevista la construcción de 1.200 viviendas--, con el centro de salud y la avenida de España, reduciendo notablemente los itinerarios actuales, al tiempo que supondrá una importante alternativa para la calle Ramón y Cajal, utilizada actualmente como vía de acceso y retorno para ambos barrios. Por su parte, la presidenta del área de Urbanismo, Cristina Casanueva, afirmó que la modificación "no supondrá ningún coste económico para los propietarios".