El portavoz del Grupo Popular en la Diputación Provincial de Córdoba, Andrés Lorite, acompañado del portavoz adjunto, José María Estepa, realizó ayer un balance de la gestión durante el primero año de Gobierno del PSOE e IU en la institución provincial, que se ha caracterizado, según dijo, «por sacar un suspenso en las grandes materias en las que ha existido una parálisis general, principalmente en lo que se refiere a política social y empleo».

En este sentido, el portavoz del Grupo Popular en la Diputación explicó que «la inactividad en todas las materias ha sido la tónica general de este primer año de Gobierno y solo sacan buena nota en márketing, cosmética y en el engaño masivo a la sociedad cordobesa, ya que dicen una cosa y hace otra y se dedican a anunciar medidas que no se llevan a cabo». «Utilizan el Palacio de la Merced como si fuera un photocall, por lo que exigimos que las maniobras de márketing desaparezcan en la sede de la institución provincial», puntualizó.

De otra parte, Lorite explicó que «después de final de curso el cogobierno recibe un suspenso en política fiscal, ya que en este primer año ha subido los tributos del suministro domiciliario de agua en un 2 por ciento». «Suspenso también recibe en cuanto a la creación del Consejo de alcaldes y alcaldesas, un órgano excluyente que durante este año no ha informado de nada ni ha servido para nada».

A juicio del portavoz, «un cero rotundo le damos también en la gestión del Consorcio de Bomberos ya que durante este curso se ha creado alarma en el cuerpo de bomberos, se ha roto la paz social y se ha colocado a un gerente político que cobra 79.000 euros al año y ha incendiado los ánimos de los bomberos».

Lorite destacó también que «otra de las promesas incumplidas ha sido la creación de la oficina antidesahucios, una promesa del propio presidente de la Diputación, el socialista Antonio Ruiz, durante su discurso de investidura», ya que en este año desde la Diputación no se ha evitado ningún desahucio, dijo. H