Tras la restauración a la que ha sido sometido en Sevilla por Pedro Enrique Manzano Beltrán, la venerada imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno regresaba ayer a Priego de Córdoba siete meses después. El Vía Crucis programado tuvo que suspenderse debido a la lluvia, realizándose el rezo de las estaciones en el interior de San Francisco.