El Centro de Investigación y Formación Agraria (CIFA) de Córdoba colabora en un proyeto que pretende mejorar la digestibilidad y calidad nutritiva de las habas para el consumo humano y animal. Esta experiencia está desarrollada en Córdoba por investigadores del CIFA, de la Universidad de Córdoba y del Instituto de Agricultura Sostenible, que viene trabajando desde los años setenta en la obtención de nuevas variedades de habas que también sean resistentes a plagas y enfermedades. El trabajo, que está coordinado en sus estudios moleculares por Ana María Torres, evitará los casos de anemia de fabismo en humanos y mejorará la alimentación de rumiantes y aves, que podrán ingerir una mayor cantidad de habas al ser más digestivas y presentar mayor valor nutritivo.

Esta iniciativa, que se incluye dentro del proyecto europeo Eufaba (participan nueve países y trece grupos de investigación), se auspició tras la alarma social generada por la Encefalopatía Espongiforme Bovino o mal de las vacas locas . La prohibición de utilizar harinas animales en la fabricación de piensos provocó que Europa tuviera que incrementar la dependencia de las importaciones de soja de los Estados Unidos, por lo que se ha incrementado la investigación para mejorar el rendimiento y la calidad del cultivo de leguminosa. Europa importa el 75% de la proteína vegetal que necesita.