El presidente del Partido Popular de Córdoba, Adolfo Molina, ha mostrado su apoyo a los trabajadores de la factoría de ABB en Córdoba que podrían ver peligrar sus puestos de trabajo en el futuro por el traslado a Turquía de la línea de corte de chapa. Molina ha mantenido esta mañana un encuentro con el comité de empresa de ABB y responsables de CCOO y UGT, en la que han trasladado su preocupación por el futuro de esta industrial y los puestos de trabajo de los más de 350 trabajadores directos que ABB tienen en Córdoba, y de los más de 500 empleos indirectos que suponen en la ciudad.
El PP asegura en una nota de prensa que "siempre estará al lado de los trabajadores, más aún cuando están demandado estabilidad para la factoría cordobesa de una empresa multinacional importante". Molina añade que "los puestos de trabajo de estos cordobeses y el desarrollo y crecimiento del sector industrial en el futuro bien merece la unión y el esfuerzo de todos".
El sector industrial en Andalucía "ha vivido unos momentos duros en los últimos años, que por suerte están empezando a remontar", indica Molina, que añade que "por ello se hace indispensable el apoyo institucional en todos los ámbitos. Córdoba es una provincia con un sector industrial pujante en muchas comarcas, como es el caso de la madera, del frío industrial o la iluminación, y hay que hacer un esfuerzo para que su economía siga creciendo y no se contraiga".
También resalta el PP que la factoría de ABB en Córdoba "es la única que fabrica el transformador acorazado en el mundo, y que puede ver peligrar su futuro ante la intención de la multinacional de trasladar a Turquía la máquina de corte de chapa". Según los trabajadores, ese traslado puede generar paradas en la producción de esta factoría que supondrían pérdidas de puestos de trabajo y deterioro de la calidad del empleo en la fábrica cordobesa.
Respuesta de la empresa
La fábrica de ABB en Córdoba no va a continuar realizando el corte de acero para el núcleo de los transformadores, tal y como se venía haciendo hasta la fecha, sino que, en su lugar, el acero llegará a la fábrica pre-cortado, siendo un cambio que "no supondrá la pérdida de ningún empleo", como ya aseguró la empresa a este diario.
Según ha indicado la empresa en una nota, con este cambio se espera "mejorar la productividad y competitividad de la unidad", mientras que los cuatro empleados afectados por esta decisión "van a ser recolocados en distintas áreas dentro de la fábrica".
En este sentido, ABB ha afirmado que "tampoco se verá afectada la capacidad productiva de la fábrica ni la entrega puntual a los clientes", garantizando que "el compromiso de entrega a tiempo a sus clientes en ningún caso se verá comprometido".
