La Ciudad de la Justicia va camino de convertirse en una realidad en apenas un año. De momento, las obras avanzan «a buen ritmo» y dentro de los plazos previstos. Según la información facilitada por la Consejería de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía, se encuentran al 62,5% de ejecución, lo que supone una inversión de 34,1 millones de euros de los 55 totales. Así, las previsiones se mantienen inalterables y la idea, ya expresada en varias ocasiones por el consejero del ramo, Emilio de Llera, es que esté en funcionamiento en otoño del 2017.

En el mismo sentido, la delegada del Gobierno, Rafi Crespín, ha resaltado que el nuevo complejo judicial se está ejecutando «en el tiempo y programa estipulados». Incluso en la actualidad se ha incrementado el ritmo de la obra con un total de 219 trabajadores. Ya se ha ejecutado la mayor parte del exterior del edificio y los trabajos se concentran ahora en el interior, con la instalación de paramentos verticales. Según el contrato las obras terminarían en febrero y se entregarían en el plazo de los dos meses siguientes. A partir de ahí, se procedería al traslado de los órganos y del personal desde las distintas sedes dispersas por la ciudad, produciéndose la apertura del complejo, probablemente, en torno al inicio del nuevo año judicial.

ASPECTOS POSITIVOS // Crespín ha destacado que la Ciudad de la Justicia es un proyecto «fundamental para los profesionales del sector», ya que permitirá «la concentración de los órganos y servicios judiciales, mejorando en eficiencia, eficacia, ahorro y servicio público». Pero también reportará beneficios, añade Crespín, «para los ciudadanos, que son el objetivo último de las políticas del Gobierno andaluz y que dispondrán de unas instalaciones de Justicia modernas y adaptadas a los retos del siglo XXI».

De otro lado, la delegada del Gobierno también ha apuntado que la realización de esta infraestructura ha supuesto «una reactivación del sector de la construcción» y, asimismo, «está siendo un estímulo para el desarrollo social y económico» de la zona de Arroyo del Moro con el incremento de servicios complementarios, por lo que «estamos contribuyendo a la articulación del territorio y a hacer ciudad».

Para Crespín, «este equipamiento responde perfectamente a los retos de la justicia del presente, pero además está preparado para afrontar los del futuro, como sería la implantación del nuevo modelo de la oficina judicial y fiscal». A este respecto, la Consejería de Justicia e Interior ya ha sacado a licitación los estudios y el modelo organizativo. El objetivo del pliego de condiciones es, según se ha publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, «regular la contratación de la prestación de servicios consistente en el estudio de cargas de trabajo, análisis de tareas y la proposición de un modelo organizativo para las oficinas judicial y fiscal para la Ciudad de la Justicia, así como el asesoramiento en la configuración de la relación de puestos de trabajo». El juez decano de Córdoba, Miguel Ángel Pareja, se mostró partidario hace unos días de que la Junta de Andalucía «haga un esfuerzo y directamente implante» el nuevo modelo en la Ciudad de la Justicia, dado que «sería un avance al pasar de lo viejo a lo nuevo y a la eficacia».