Igual que "arreglar una calle no es de derechas ni de izquierdas, sino de sentido común, apostar por la ciudad como referente cultural no es de derecha o izquierdas", sino una forma de poner los intereses de Córdoba "por delante del partido". Así habló ayer el alcalde de Córdoba y candidato a la reelección por el PP, José Antonio Nieto, para resumir sus demandas a la Junta de Andalucía, a la que pidió que "deje de castigar a Córdoba" y a la que reclamó que acometa de una vez proyectos comprometidos, desde el desarrollo del plan conjunto Axerquía Norte (incluido el centro cívico de San Agustín) al área de San Martín de Porres, el desarrollo del entorno de Medina Azahara y del propio conjunto arqueológico, el abastecimiento de agua a Cerro Muriano y Las Jaras o un nuevo plan de ascensores.

Precisamente, para ilustrar estas demandas Nieto eligió la plaza de San Agustín para reunir ayer a la práctica totalidad de su candidatura, reiterando el anuncio de que en un mes se comenzará esta reforma cuyo presupuesto ronda los 800.000 euros.

Sin embargo, de todo en lo que la Junta "o nos dice que no o nos contesta con el silencio" perjudicando a la ciudad, Nieto destacó la Cultura y abogó por que, al igual que a Málaga se le reconoce su peso en el sector turístico con un consejero de Turismo malagueño, el próximo consejero de Cultura sea cordobés.

Capítulo aparte, y tras ser preguntado por la prensa por el caso ERE y su repercusión en la formación del Gobierno andaluz, Nieto dijo que "no tengo constancia de que Griñán y Chaves se estén yendo". Sin embargo, puntualizó que "los 3.000 millones de euros" de fraude "no se aclaran con la marcha a su casa, sino con una investigación que aclare lo ocurrido". Nieto, eso sí, lanzó una oferta de diálogo y colaboración al próximo Gobierno andaluz e incluso dijo que también será exigente con el Gobierno central para que cumpla sus compromisos con la ciudad "esté el partido que esté".

Por su parte, el presidente del distrito Centro, Rafael Soto, tomó la palabra para poner en duda que la Junta vaya a aceptar esta oferta de diálogo y criticó igualmente al Gobierno andaluz por, consideró, tener proyectos paralizados en la zona.