A lomos de la historia, la ministra de Economía, Nadia Calviño, recorrió ayer con su familia los rincones de Córdoba, acompañada por Luis Recio, guía oficial de la Asociación Profesional de Informadores Turísticos (APIT) e historiador. La visita, que duró unas tres horas, comenzó a las 9.00 en el hotel NH Amistad y terminó en el complejo monumental de la Mezquita-Catedral. Ante los restos romanos viajaron a la época de Claudio Marcelo y la fundación de la ciudad que ese mismo día se abría inconquistable, conquistadora, ante miles de turistas, ante ellos. Pasearon por el Puente Romano, se adentraron en la geometría del califato en la fachada oriental de la Mezquita Catedral, observaron la fragancia de una ciudad en la Calleja de las Flores. En la Judería, invocaron a Séneca, Averroes y Maimónides. Y, finalmente, en la Mezquita-Catedral contemplaron una de las columnas principales del pasado y del presente de la ciudad. «Me encanta Córdoba, por supuesto», aseguró a este periódico Calviño. Tras la visita, se marchan para seguir recorriendo Andalucía. Córdoba, como Cádiz y Sevilla antes, ya se alejan en el retrovisor, pero, según Recio, la ministra afirma que volverá con el presidente.