El portavoz municipal del PP y candidato a la Alcaldía, Rafael Merino, propuso ayer que los cordobeses sean, a través de una consulta popular local, quienes decidan el futuro del edificio de la antigua residencia sanitaria teniente Coronel Noreña, abandonada desde hace 17 años y sobre la que ahora se plantea derribar tras un acuerdo alcanzado entre la Consejería de Salud de la Junta y la Gerencia de Urbanismo.

Para elaborar el contenido de la pregunta que Merino quiera someter a referendum, el candidato propone que se forme una comisión compuesta por representantes del movimiento ciudadano, un representante de la Junta, otro de la Subdelegación del Gobierno y uno de cada grupo municipal. Merino señaló al presidente del CES, Balbino Povedano, como la persona que, si aceptara el ofrecimiento, podría liderar esa comisión.

Reconocimiento "con humildad" que los partidos políticos no han sido capaces en 17 años de dar una solución a Noreña, Merino se plantea dar una solución definitiva a este problema y asegura que la voluntad de los ciudadanos la ejecutarán las administraciones.

Por su parte, la alcaldesa, Rosa Aguilar, dijo que esta propuesta pone de manifiesto que "no era verdad" la referencia de Merino según la cual "había solucionado este problema". En su opinión, el jefe de la oposición debería concitar el consenso de las instituciones implicadas. Añadió que ella tiene encauzado el asunto.