--¿Cómo es posible, con la que está cayendo, que una empresa constructora siga estando viva?

--Porque hemos seguido la filosofía de nuestro padre: "Estar siempre con los pies en el suelo".

--¿Qué perspectivas ven?

--A corto y medio plazo tenemos varias promociones. A largo plazo, nos esperaremos a ver cómo se desarrolla la situación.

--¿Han notado el bajón económico en su estructura?

--Sin duda. A la crisis económica no hemos sido ajenos ningún sector. Pero no hemos parado.

--¿Han tocado la obra civil?

--En ella se curtió el inicio de la actividad familiar, pero hemos preferido centrarnos en la vivienda. Hemos realizado algunos trabajos, como la primera remodelación del anterior Ayuntamiento de Pedro Abad, donde también hemos construido la nueva farmacia, y la puesta en servicio del hotel Mirador de Montoro.

--¿Qué problemas se han encontrado en los últimos tiempos?

--Sobre todo la falta de financiación para las familias que desean comprarse una vivienda. Nos encontramos con personas que quieren y necesitan una vivienda, pero el banco no les financia.

--¿Qué tipo de viviendas construyen ustedes actualmente?

--La residencial directa. La que necesitan nuestros clientes para vivir. Nunca nos hemos adentrado en la especulación.

--¿Qué soluciones plantearían ustedes a los bancos?

--Si miramos las estadísticas, nosotros estamos por debajo de la media de los préstamos que se conceden. Si se dice que se están dando préstamos de entre 140.000 y 150.000 euros, el tipo de vivienda que nosotros hacemos está en torno a los 90.000 y 100.000 euros de préstamo, así que entra dentro de las posibilidades de una familia, pero los bancos tienen el grifo cerrado.

--¿Cuál es el secreto para seguir estando vivos?

--Tener unos márgenes de beneficio más estrechos y volcando la inversión de la obra en la calidad y cuidando todos los detalles.

--¿Cuántas viviendas han construido desde el año 1985?

--Tenemos contabilizadas unas 450.

--¿Y desde el año 2008, ya con la firma Villarejo Siglo 21?

--Unas 50. Y ahora estamos construyendo otras 11 nuevas viviendas en la calle Cervantes de Montoro.

--¿Cómo ven el horizonte?

--Volveremos a construir las viviendas que necesita el pueblo, para vivir, a la demanda. Entre 10 o 12 viviendas al año. Volveremos al crecimiento de los años ochenta. Todo lo demás son ilusiones y fantasía.

--¿A nivel técnico desarrolla su actividad solo para su empresa o también para otras?

--A nivel de aparejador y arquitecto ofrezco mis servicios a particulares, administraciones públicas y empresas constructoras que los soliciten.

--¿Cuánto han bajado los proyectos en el Alto Guadalquivir?

--Estamos en una bajada del 90%.

--¿Qué tipo de proyectos se hacen hoy?

--Algo individual. Las administraciones tienen el grifo cerrado y lo poco de trabajo que entra es en otro estudio que tenemos en Cabeza del Buey, en Badajoz.

--¿Pensaban hace unos años que se llegaría a esta situación de decadencia económica?

--Sí, pero no de manera tan tajante. Esto no se lo esperaba nadie.

--¿Cuándo cree que llegará el fin de la crisis?

--No lo sé, pero el volumen que había antes es irrecuperable.

--¿Qué hay que hacer para que no decaiga más la situación?

--Hacernos la idea de lo que somos capaces de llevar a cabo cada uno. Hay que despertar del sueño, abrir los ojos y pisar el suelo firme.

--¿Qué le dice a las administraciones públicas?

--Que apuesten por las empresas y técnicos de la zona.

--¿Qué dice de las cifras macroeconómicas?

--A nuestra empresa no le afecta. Nuestro día a día es más sencillo y directo. Lo que vemos es una falta de alegría y confianza en todos los sectores de nuestra economía. Mientras esa confianza no se recupere, no volveremos a la senda del desarrollo. Esto se traduce en una forma de vivir, porque se ha perdido la seguridad en el trabajo. Si no se sabe lo que va a pasar en dos o tres años, imagínese en 15 o 20 años de préstamo.

--¿De quién depende esa confianza?

--De las personas, que debemos ser más honradas. Si entre todos no somos conscientes de sacar esto adelante, será imposible salir de aquí.