LUGAR DE NACIMIENTO BARCELONA (1954).

TRAYECTORIA SE LICENCIO EN DERECHO EN NAVARRA EN 1975 Y SE INCORPORO AL DESPACHO FUNDADO POR SU ABUELO. HOY ESTA PRESENTE EN NUEVE PAISES Y PARA EL TRABAJAN CERCA DE 900 ABOGADOS.

--¿Pasa el futuro de la abogacía por una regulación en el acceso a la profesión?

--En España hay muchísimos abogados, 140.000, más que en la mayoría de los países de nuestro entorno, y en cambio, el número de estudiantes en la facultades de Derecho viene disminuyendo en los últimos tres años. Veo bien que haya un examen de acceso, como en otros países, si queremos dignificar la profesión.

--Al estar su firma presente en el extranjero, ¿su percepción de la Justicia es que funciona en España mejor o peor que en otros sitios?

--Los males de la Justicia, en general, son globales. Si preguntáramos a los ciudadanos de países cercanos dirían que querrían una Justicia más rápida. Dicho esto, hay algunos sistemas judiciales que están mejor que el nuestro, como los anglosajones; no solo por el sistema en sí, que ya es rápido, sino por el abanico de recursos --conciliación, arbitraje...-- del que disponen, que es tan importante como lo otro. Otros países están peor.

--¿Pensó en algún momento cuando empezó en el despacho de su abuelo que iba a llegar a donde está?

--Sinceramente, no. Siempre alenté la idea de hacer un despacho grande e internacional; tuve ese sueño. También tuve socios con empuje para llegar hasta aquí, como Manuel Olivencia.

--¿No se ve atendiendo un turno de oficio?

--Confieso que no; ni lo he hecho, ni me he visto. Por satisfacción, los abogados más jóvenes de la firma han puesto en marcha un programa de asistencia gratuita para quienes la necesitan. Hay un comité que selecciona los casos y participan todos los abogados.

--Hizo la mili en Cerro Muriano. ¿Qué recuerdos tiene?

--Fue en el año 75 y España dio un vuelco. Aprendí muchas cosas. Yo venía de una familia acomodada y me encontré con que tenía que dormir en camastros en habitaciones con 300 personas, y bajo las órdenes de militares que tenían menos instrucción que yo. Aquí conocí a Paco Lobatón y a José María Forqué, hijo, con los que hice gran amistad.

--¿Cuatrecasas tiene pensado seguir en expansión?

--En los próximos dos años, nuestro objetivo es acabar de consolidar las veintitrés oficinas. Haremos algún crecimiento de alianza en Málaga; pero solo eso.