El Ayuntamiento continuará adelante con su plan para «salvar» Rabanales 21, a pesar del nuevo parón que sufre la tramitación de la innovación del PGOU para permitir una zona comercial, cuya aprobación provisional se esperaba para julio. Esa es la idea que transmitió ayer la alcaldesa, Isabel Ambrosio, que dejó claro que la fase actual es el «final del procedimiento por el cual se autoriza la venta de parcelas para el área de servicio», que es donde irá la zona comercial, que tendrá también espacio para la innovación. El problema ha sido que «el informe de Comercio llegó hace pocos días y eso nos obliga a tener que llevar la aprobación provisional al mes de septiembre».

Para despejar dudas, Ambrosio insistió en que «no hay ningún elemento en el informe de Comercio que impida que sigamos con nuestra hoja de ruta y con los planes establecidos para salvar el parque tecnológico Rabanales 21». Es más, y a pesar de que Urbanismo va a estudiar más a fondo el documento, incidió en que «todos los elementos que se incorporan en el informe son favorables» y que «lo que se ha hecho es aceptar las sugerencias de Comercio».

A juicio de la alcaldesa, la innovación «es una oportunidad que no puede pasar por delante de esta ciudad» y ha recordado que el Ayuntamiento lleva tiempo «trabajando para dar una solución a un proyecto en el que este equipo de gobierno cree firmemente», aunque reconoce que «la solución global» no pasa por una solo decisión.

Ayer tuvo lugar una reunión a nivel de equipo de gobierno para abordar la situación de la innovación y el informe de Comercio.

Mientras, los máximos responsables de Rabanales 21 y el promotor del proyecto comercial Rabanales Plaza se mantienen a la espera de que continúe la tramitación de la modificación del PGOU. El presidente de Rabanales 21, Manuel Pineda, espera que se produzca la innovación y contar en los próximos años con un parque que genere riqueza y empleo.