El Ayuntamiento de Córdoba dio luz verde ayer al montaje de 104 casetas en la próxima Feria de Mayo, de las que 15 pertenecen a colectivos que montarán por primera vez. La concejala de Promoción de la ciudad, Carmen González, informó de que inicialmente se presentaron 112 solicitudes de casetas (el plazo concluyó el 17 de enero), de las que se han denegado un total de 8, por distintos motivos y después de resolverse las incidencias de la fase de aprobación provisional.

En 2016, se solicitaron también 112, aunque finalmente se montaron 92 casetas, una cifra algo inferior a las 97 que se pusieron en la feria de 2015. Es habitual que el número inicial de solicitudes no se corresponda con los recintos que finalmente se instalan en El Arenal, ya que los colectivos y solicitantes no logran hacerlo por diferentes motivos, principalmente económicos. Las bases reguladoras para la instalación y uso de las casetas son similares a las de años anteriores. Aunque se ha vuelto a postergar el debate sobre la reorganización del recinto, este año hay una partida de 305.000 euros para mejorar el pavimento y las sombras.

Otra de las fiestas de mayo que ha empezado a prepararse es la de los patios. Ayer, la Junta de Gobierno Local aprobó la contratación del servicio de control auxiliar durante el concurso, que saldrá con un precio de licitación de 26.363 más IVA (31.900 euros). El Ayuntamiento trata, con dos meses de margen, de evitar los problemas del año pasado, cuando apenas a 24 horas de la celebración del certamen se contrataron a 30 controladores (Hispano Servives se hizo con el contrato por valor de 17.785 euros) y 30 cicerones (Fashion Azafatas, por 21.598 euros). Este año los controladores serán los que fiche la empresa que resulte adjudicataria del concurso y no, como el pasado año, personas vinculadas a los mismos patios que entraron en concurso. La adjudicación dependerá «únicamente del criterio económico», según la información facilitada ayer tras la junta de gobierno.