Podemos e IU solicitaron ayer la celebración de un debate general con propuestas de resolución en el pleno del Parlamento sobre la situación de la sanidad pública en Andalucía, una iniciativa que justifican en la «fuerte» contestación y el rechazo social al deterioro que padece este servicio. Ambos grupos afirman en la petición que comparten las reivindicaciones de la creciente Marea Blanca, integrada por plataformas, colectivos sociales, asociaciones de usuarios y pacientes, organizaciones sindicales y personas que a título particular ponen en evidencia el «importante rechazo social ante el deterioro que la sanidad padece».

Esgrimen el incremento de la media de espera quirúrgica, de consultas y pruebas diagnósticas o que ya no se publican datos sobre algunas de estas. Las listas de espera -aseguran- prolongan los tratamientos con medicamentos y de ello se benefician las farmacéuticas, al incrementarse el gasto y las derivaciones a empresas privadas.

Podemos e IU hacen referencia a otras reivindicaciones, como el necesario aumento de recursos destinados a la Atención Primaria, la mejora de la atención sanitaria en el medio rural o la exigencia de una mayor transparencia en la gestión del sistema sanitario. A todo ello suman las condiciones de sus trabajadores, «aquejados de temporalidad y parcialidad» en los contratos y de una precariedad que «se ha extendido por todo» el sistema sanitario público de Andalucía.

En este sentido, recuerdan la pérdida de miles de puestos de trabajo «imprescindibles» para devolver a la sanidad andaluza la calidad de su cartera de servicios, situaciones a las que se enfrenta la ciudadanía «sin recibir» respuestas del Ejecutivo andaluz, agregan.

«Entendemos que las demandas planteadas en torno a la finalización de equipamientos sanitarios o las polémicas fusiones hospitalarias merecen un debate en profundidad con adopción de acuerdos que reorienten la política pública sanitaria en nuestra comunidad autónoma», demandan los dos partidos.

Por su parte, el PP andaluz abogó ayer por la creación de un grupo de expertos en la Consejería de Salud que «encauce la situación» de la gestión sanitaria en la comunidad y que esté compuesto por los profesionales sanitarios, los sindicatos, el Colegio de Médicos y por representantes de los pacientes. La portavoz parlamentaria del PP-A, Carmen Crespo, informó de que esta será una de las medidas que va a plantear su formación, ya que entienden que el equipo actual está «incapacitado para dar una solución» a la situación actual.

Indicó además además que al Parlamento debe acudir un grupo de trabajo formado por profesionales sanitarios que dé a los grupos «propuestas contundentes» para mejorar la sanidad pública andaluza.