--¿Cuándo le dio por imitar?

--Soy actriz y llevo haciendo teatro desde los 8 años. La imitación ha sido una faceta que nunca había usado profesionalmente. Siempre he imitado a mi profesora de latín, a los amigos, a los vecinos para gastar alguna broma y echar unas risas, lo típico, pero no se me había ocurrido que podría ganarme la vida imitando a la gente.

--¿Cómo decidió entonces explotar esa faceta?

--Fue gracias a un compañero de Los Vandelay, mi familia teatral, la compañía con la que he trabajado el humor absurdo y con quienes he grabado mil vídeos. Él me animó a hacer uno con imitaciones que me diferenciara de otras actrices. Lo curioso es que he enviado un montón de vídeos a productoras y éste, que solo ha estado en internet, es el que ha triunfado.

--Parece haber sido la primera sorprendida del resultado.

--Efectivamente, aún no me lo creo. Me siento como ese personaje de 'A Roma con amor', de Woody Allen, que se levanta un día y, de repente, es famoso y todo el mundo lo conoce. Da un poco de susto, la verdad.

--Esto no se enseña en las escuelas. Hay que ser autodidacta...

--Bueno, yo aprendí mucho en Arte Dramático con mi profesora de clase de técnica vocal que era realmente buena.

--Ha dado el salto desde la cola del paro a Atresmedia. ¿Qué le han pedido que prepare?

--Sí, hace dos días estaba en el SAE como demandante de empleo y el viernes empiezo en 'Los viernes al show' y ya tengo ofertas para ir a varios programas de la cadena. De momento, no me han pedido que prepare nada, aún no sé cuál va a ser mi función. Ha sido todo muy rápido y en la tele todo cambia tanto...

--¿Los personajes le salen solos o hay que repasarlos a diario?

--Cuando tienes bien cogido un personaje no hay que ensayar nada, te sale de forma natural.

--¿Cuál es su favorito?

--Tamara Falcó fue la primera y es una de mis favoritas. Tiene esa forma de hablar tan particular que me divierte mucho imitarla.

--¿Cómo crea a los personajes?

--Lo primero es observar, escucharlos mucho hasta que la voz se mete en tu mente. Luego te fijas en los giros, los matices...

--¿Todo el mundo es 'imitable'?

--No. Hay personas, mi madre por ejemplo, a quien no puedo imitar. No sé si es porque la llevo escuchando toda la vida o porque en su voz no hay nada que me llame especialmente la atención. Siempre tiene que haber algo. A veces, voy por la calle y oigo alguna voz que me cautiva y no se me va de la cabeza hasta que llego a casa y la reproduzco.

--¿Quién es su referente?

--En España, Carlos Latre, sin duda. En EEUU, Jim Carrey.

--¿Cuál es su reto imitativo?

--Me encantaría imitar a hombres, pero es complicado porque no tengo una tesitura de voz masculina y me cuesta mucho.

--A partir del viernes, le van a pedir imitaciones a cada paso, ¿está preparada?

--Hasta ahora, los que se me han acercado lo han hecho con educación y con cariño, espero que siga siendo así.