La de ayer no era una protesta más, una concentración más, un día de trabajo "perdido" más. Ayer, más de siete años y medio después de que fuera denunciada la presunta estafa cometida entre septiembre y diciembre de 2004 en el seno de la cooperativa de segundo grado Almazaras de Priego, la mayoría de los afectados, unas 2.000 familias de los términos municipales de Almedinilla, Fuente Tójar y Priego, estuvieron pendientes, por uno u otro medio, de todo lo que ocurría en la sala primera de la Audiencia Provincial de Córdoba, donde se iniciaba la vista oral contra siete de los acusados en la segunda querella de este complejo caso.

Junto al medio centenar de afectados que se desplazaron hasta la capital y en las puertas de la Audiencia seguían solicitando lo que han hecho durante estos últimos años: "justicia y que paguen los culpables", los que permanecieron en sus casas o puestos de trabajo, intentaron estar informados en todo momento por medio del teléfono, de lo que fue esta primera jornada de una vista oral que no ha pasado desapercibida a la opinión pública dada la cobertura informativa que durante el fin de semana y toda la jornada de ayer ha tenido el tema en los medios de comunicación.

Y como no podía ser de otra manera, en Almedinilla, Fuente Tójar y Priego, donde tiene su sede una de las cooperativas afectadas por la presunta estafa, el inicio del juicio centró numerosas tertulias durante el desayuno y el aperitivo, dada la magnitud del proceso, residir en la localidad varios acusados, las cantidades millonarias que se manejan y el ejemplo de otros casos simulares en los que aquellos que en principio fueron imputados como culpables salían de "rositas". Improvisados coloquios en los que, al margen de ese halo de pesimismo inicial, siempre se ponía sobre el tapete el tesón y la fe que los afectados han tenido en estos más de siete años.

De otra manera no se entendería que, pancarta en mano y armados de paciencia, se dispongan a seguir todo el proceso, porque como decía uno de los que ayer asistieron a la primera jornada de la vista oral, "por escuchar hablar a uno esos --en alusión a los acusados-- y ver lo que dicen, merece la pena venir a Córdoba cuántas veces sea necesario".

Así lo hará un grupo numeroso deseoso de seguir al detalle todas las declaraciones de los imputados, ya que tras la maratoniana jornada de ayer, en la que prestaron declaración cuatro de ellos, hoy martes está prevista la declaración de los tres restantes así como de todos los testigos, en lo que se presume sea otro intenso día, pese a lo cual la "satisfacción" es la palabra que puede resumir esta primera sesión de la vista oral.