--Los sanitarios de la medicina pública reivindican la derogación de los reales decretos que regulan los recortes de los gobiernos central y autonómico, al menos "hasta que no se recorte una administración que consideran hipertrofiada y duplicada", así como organismos y entidades que no son para mantener el estado del bienestar (televisiones públicas, agencias de calidad o administraciones paralelas).

--A corto plazo, los profesionales sanitarios demandan el mantenimiento de los puestos de trabajo del personal interino y eventual con su jornada laboral íntegra (el decreto andaluz se la reduce un 10%, junto con su sueldo) porque "es imposible mantener la sanidad con la calidad y excelencia mantenida hasta ahora con menos efectivos humanos".

--Recuperación de la dignidad en el trabajo, libre de cargas administrativas y burocráticas.

--Igualdad en la aplicación del incremento de jornada semanal con respecto a otros trabajadores públicos.

--Recuperación de un sueldo digno acorde con las responsabilidades adquiridas en las labores diarias. En este sentido recuerdan que los andaluces son los sanitarios peor pagados de España (desde antes de los recortes).