Los jefes de la diplomacia de Estados Unidos, John Kerry, y de Rusia, Serguéi Lavrov, están negociando un documento que desean presentar al término de su reunión con sus homólogos de Ucrania y de la Unión Europea con el fin de calmar la escalada de tensión en el este ucraniano. Lavrov ha anunciado este jueves que se ha alcanzado un acuerdo de desarme de todos los grupos ilegales en Ucrania y la amnistía de aquellos que participaron en los desórdenes registrados en el oeste del país. También se ha acordado que todas las dependencias públicas tomadas por grupos armados en distintas localidades del este de Ucrania deben ser devueltos a sus legítimos propietarios.

Kerry y Lavrov han conversado sobre el contenido de ese documento y están presentado el resultado de su discusión a la responsable de la Política Exterior europea, Catherine Ashton, y al ministro de Exteriores de Ucrania, Andriy Deschitsa. El documento fue propuesto por el ministro ruso y contiene elementos de la posición que Moscú ha hecho pública en relación a cómo excluir el riesgo de un conflicto armado. Su idea es desarmar a los grupos que han ocupado dependencias públicas en varias ciudades del este de Ucrania y que este país entre en un proceso de reforma constitucional.

La nueva Constitución, desde el punto de vista de Rusia, debe establecer un modelo federal para Ucrania, posición que Lavrov ha defendido este jueves en la primera parte de la reunión a cuatro bandas, según fuentes diplomáticas. "Esta reunión concluirá con un resultado, no serán palabras vacías", comentó un diplomático muy próximo a esta negociación.

La reunión de Ginebra tiene lugar horas después de que tres miembros de grupos prorrusos murieran tras una intervención de fuerzas ucranianas en la localidad de Mariúpol, en el sureste de Ucrania. Estas son las primeras víctimas de una acción de Ucrania, a la que Rusia había pedido contención, tras el ultimátum presentado a los prorrusos sublevados por el presidente ucraniano, Alexandr Turchínov.

Occidente aprobó sanciones contra Rusia tras su decisión de anexionar la península ucraniana de Crimea y sus líderes políticos han adelantado que dictarán un nuevo paquete de medidas contra este país si decide mantener su actitud ante la crisis en Ucrania.