Florin no podía ser más expresivo. No podía serlo ni dentro ni fuera del campo. La misma contundencia mostró en el césped del Nou Estadi que delante de la cámara de televisión. "Me quedo con cara de tonto". Lo dice un futbolista que acaba de marcar tres goles. "El 'hat-trick' es muy amargo, te quedas con una cara de sorpresa...". Lo dice un futbolista que va camino de pelear por el pichichi de la categoría. "Metimos cuatro goles fuera, sabiendo lo difícil que es marcar fuera", continuaba. Lo dice un delantero al que le inquieta una realidad. "No sé lo que tenemos que hacer para no recibir tantos goles".

Sus tantos ya no sirven para sumar de tres en tres, como sucedía hace unos meses. "Siempre ganábamos 1-0, 0-1 o 2-1 y los puntos se quedaban en casa, pero ahora llevamos una racha en la que encajamos muy fácil", advirtió. "No sé qué tenemos hacer", repetía. "Al menos nos llevamos un punto de aquí", se consoló. Pero no era suficiente y siempre volvía a lo mismo. "No es normal lo que nos ha pasado, porque marcamos cuatro goles fuera y creo que nos podemos quedar fuera del 'play-off' ya esta jornada", observaba, antes de conocer el resto de resultados de la jornada, que finalmente han dejado al Córdoba en quinta posición, empatado con el sexto, el séptimo y el octavo, y con solo tres puntos de ventaja respecto al decimotercero.

Apenas había motivos para la satisfacción en el vestuario blanquiverde. "Está claro que nos vamos con la sensación de que se nos han escapado dos puntos", reconocía Pedro Ríos. "Lo hemos tenido y no lo hemos aprovechado". Solo queda el mal menor. "El Nástic está en un estado de forma impecable y hemos impedido que nos sacara más distancia y se pusiera lejos en la clasificación; seguimos metidos en la zona de 'play-off', pero nos vamos con la sensación de perder dos puntos", incidía Ríos.

Carlos Caballero tampoco entendía cómo no se habían llevado el partido: "Es difícil adelantarte cuatro veces y no llevarte el partido. Tenemos que analizar errores; es una pena".

A pesar de todo, el madrileño defendía que la afición cordobesa tenía que estar satisfecha del empate: "La dinámica del Nàstic era muy buena, es el equipo más en forma del campeonato y la gente de Córdoba debe estar contenta con nosotros", aseveraba.