Un acto "electoralista" en el que se han saltado "a la torera" todas las exigencias administrativas. Así calificaba el diputado socialista Antonio Hurtado la colocación ayer de la primera piedra del nuevo cuartel de Priego, acto en el que ningún cargo del PSOE estuvo presente. Según Hurtado, las conclusiones a las que ha llegado el PSOE tras las gestiones realizadas con el Ministerio y con empresas que han tomado parte en la licitación de esta obra es que se trata de una "adjudicación provisional", advirtiendo que las empresas que no han sido las adjudicatarias "no han recibido todavía notificación para poder recurrir si es que lo consideran". Esto, a juicio del diputado socialista, significa que "no ha habido adjudicación definitiva", lo que a su vez trae consigo que no se ha podido llevar a cabo la firma del contrato de obra, y sin este último trámite, tampoco se ha producido la publicación en el BOE, lo que impide también la firma del acta de replanteo e imposibilita solicitar ni dar licencia de obra. De ahí que para Antonio Hurtado el de ayer fuese un acto "electoralista, saltándose a la torera todas las exigencias y queriendo hacer publicidad de algo que en estos momentos no se debería hacer".
