El 2017 fue un importante año para Paco Montalvo, ya que afianzó su carrera con la salida de su segundo disco, Corazón flamenco, que enseguida cosechó un gran éxito y en diciembre alcanzó el número 7 en ventas en España y el top 10 en México, duplicando las ventas del anterior trabajo, Alma de violín flamenco. Con una meteórica carrera, se ha convertido en pocos años en un fenómeno de referencia ya que, como pionero, incorpora el violín al flamenco, aunando así su formación clásica a las raíces de su tierra. Montalvo ha aportado al flamenco y a la música clásica española una visión artística totalmente diferente, con versiones de obras de Paco de Lucía, Falla, Sarasate, Granados, Tárrega o Albéniz. Su trabajo incluye además piezas universales, propias y populares del flamenco.
La carrera internacional de Montalvo está marcada por dos conciertos: el primero de ellos en Tel-Aviv, junto a la Orquesta Sinfónica de la Ópera de Israel, y el segundo, en la sala principal del mítico Carnegie Hall.
El reconocimiento como Cordobés del Año se suma a otros galardones que ya ha ido recogiendo a lo largo de su trayectoria por los escenarios. Así, Montalvo ha recibido numerosos galardones nacionales e internacionales, entre ellos el Premio internacional Arthur Rubinstein, Premio Libertad, Premio Bandera de Andalucía, Premio Flamenco Pepa de Utrera…
«Tengo, sinceramente, una alegría inmensa. Me siento muy feliz por el reconocimiento que me hace precisamente mi tierra», aseguró el violinista cordobés tras conocer la concesión del premio como Cordobés del Año 2017. Para Montalvo, es tan buena la noticia que «hay que celebrarla por todo lo alto». Aunque tal vez la celebración tenga que esperar un poco de tiempo, dado que ahora se encuentra inmerso en la preparación de su tercer trabajo discográfico, en el próximo concierto que ofrecerá en el Palau de las Artes de Valencia y el que interpretará en Madrid en el teatro Apolo en junio.
