Damiana Alemany quiere terminar de una vez por todas con el insufrible dolor físico, que ha convertido sus últimos 30 años de vida en un infierno. "Llevaba años soñando con la muerte asistida porque he deciddo que ya basta de sufrir más dolor y no quiero ser una carga para nadie".

La mujer de 60 años a la que le han denegado la eutanasia anuncia que busca otros medios y que le quedan pocos días de vida. Pero a pesar de este drático anuncio, no pierde nunca la sonrisa y reitera que sigue enamorada de la vida que tanto la ha castigado.