El laurel es una planta muy útil para combatir distintas enfermedades. Al igual que el romero y sus propiedades beneficiosas para la salud, la hoja de laurel se puede aplicar para muchos menesteres: desde medicinales hasta sanitarios.

La planta de laurel está viviendo un auténtico redescubrimiento desde que se ha vuelto a popularizar su alta efectividad para aromatizar la casa si la colocamos detrás de elementos clave como la estufa, el radiador o incluso el horno.

Otra de las razones que apuntalan el evidente éxito de la hoja de laurel es su aplicación para la salud, ya que facilita la lucha contra las inflamaciones, ayuda a disminuir el dolor, mejora las digestiones, reduce la tos y el dolor de garganta.

La forma de tomar el laurel para experimentar todos sus efectos beneficiosos es cortar las hojas y después hervirlas en una olla con un poco de agua. Finalmente, hay que dejar que la infusión repose durante cinco minutos hasta que se enfríe. Finalmente, se aplica sobre la piel utilizando un algodón o paño.

Gracias a esta receta, podremos combatir la enfermedad más 'temida': el envejecimiento.