Adiós al colesterol: este el 'súper' cereal que tienes que comer todos los días para regularlo

Si hay algo importante a partir de cierta edad, eso es la salud cardiovascular: una de las principales preocupaciones cuando comenzamos a cumplir años debido a la gran cantidad de enfermedades que se pueden desarrollar y al alto índice de mortalidad que se le achaca.

Más allá de los medicamentos y recomendaciones de los doctores, la ciencia y la medicina nos ofrecen una solución apetitosa y fácil de incorporar a nuestra dieta diaria: la avena. Este cereal, ampliamente conocido por sus propiedades nutritivas, emerge ahora como un aliado clave en la lucha contra el colesterol.

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Esta es la diaria cantidad que necesitas para controlar el colesterol

Según información proporcionada por la prestigiosa Mayo Clinic, un tazón de avena puede ser una herramienta poderosa para reducir los niveles de colesterol en el organismo. La avena contiene fibra soluble, especialmente beta-glucano, que se ha demostrado que reduce el colesterol LDL, comúnmente conocido como el "colesterol malo". Esta fibra soluble actúa al reducir la absorción del colesterol en el torrente sanguíneo, lo que contribuye a mantener unos niveles saludables.

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Los beneficios de la avena en la regulación del colesterol no se detienen ahí. Además de su capacidad para disminuir el colesterol LDL, este cereal es rico en avenantramidas, compuestos con potentes propiedades antioxidantes que protegen contra la acumulación de radicales libres en el cuerpo.

Trucos para incorporar la avena a nuestra rutina diaria

El portal Mejor con Salud también respalda el uso de la avena como un aliado en la reducción del colesterol. Destaca su alto contenido en fibras solubles, que inhiben la absorción de grasas en el tracto intestinal, evitando así que pasen a la sangre y se acumulen en el organismo.

Pero, ¿cómo incorporar la avena a nuestra dieta de manera efectiva? La respuesta es sencilla y deliciosa. Se recomienda consumir media taza de avena al día, preferiblemente en el desayuno, ya sea en forma de avena molida o copos instantáneos. Para potenciar aún más sus efectos, se sugiere agregar una cucharada de semillas de lino y acompañarla con frutas frescas como fresas, arándanos o frambuesas.

Es importante recordar que, si bien la avena es un componente clave en la reducción del colesterol, mantener una dieta equilibrada y variada es fundamental para obtener resultados óptimos. Combinar el consumo de avena con otros alimentos recomendados, como pescado graso, frutos secos, aguacates y aceite de oliva, así como limitar el consumo de grasas saturadas y grasas trans, puede potenciar los efectos positivos en la salud cardiovascular.