Llega el calor y se viraliza el 'truco de la percha' para el mejor cambio de armario

Con este sistema, el cambio de temporada será mucho más rápido y eficiente

Llega el calor y se viraliza el 'truco de la percha' para el mejor cambio de armario

Llega el calor y se viraliza el 'truco de la percha' para el mejor cambio de armario

Desde que el frío abandono la Península a finales de febrero, las temperaturas no han dejado de ascender hasta alcanzar valores más propios de junio que de marzo. España entra en una Semana Santa con los termómetros disparados y ya son muchos los que han guardado la ropa y abrigo y están pensando en hacer el cambio de armario antes de tiempo.

El cambio de armario es ese momento en que se guarda la ropa de la estación anterior para sacar la de la siguiente: es una fecha que muchos aprovechan, además, para seleccionar qué ropas se quedan y cuáles pasan a mejor vida; para limpiar o simplemente para dar un nuevo orden a la disposición de las prendas.

El 'truco de la percha' para hacer el cambio de armario

El método o práctica de la percha es un sistema que se ha hecho viral y que sirve para hacer el cambio de armario de forma más rápida y eficiente. Con él, conseguimos aligerar una de las principales tareas cuando adaptamos nuestro ropero a la llegada de una nueva época: la selección de qué prendas se quedan y cuáles se van.

La técnica consiste en, al volver a poner toda la ropa en perchas, ponerlas en el mismo sentido: por ejemplo, con la punta del gancho hacia adentro. A partir del cambio de armario, hay que dar la vuelta a cada una de las prendas que utilicemos y así, cuando pasen los seis meses y volvamos a enfrentarnos a esta tarea estacional, sabemos qué prendas nos hemos puesto y cuáles no hemos utilizado en toda la temporada.

¿Qué hacer con la ropa que retiras en el cambio de armario?

Cuando sacamos una prenda de la circulación, lo último que debemos hacer es tirarla a la basura. Para tener un trato sostenible y responsable con nuestra relación con la moda, hay que intentar dar una segunda vida a las camisetas, pantalones o zapatos que no vayamos a utilizar más.

En primer lugar, podemos depositarla en los contenedores de reciclaje habilitados por el Ayuntamiento, pasársela a un amigo o familiar o darle un uso distinto convirtiéndola en trapos de cocina, en un bolso o incluso un delantar.