Efecto protector

Descubren el mecanismo que convierte a la dieta en un neuromodulador para tratar enfermedades como el alzhéimer

El consumo de polifenoles -compuestos que se encuentran de forma natural en los alimentos y bebidas de origen vegetal- se puede asociar a una menor incidencia de enfermedades como el alzhéimer o párkinson

Alimentos de origen vegetal.

Alimentos de origen vegetal. / CSIC

Nieves Salinas

Un trabajo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) revela cómo el consumo de polifenoles en la dieta se puede asociar a una menor incidencia de enfermedades crónico-degenerativas. Los investigadores explican que los polifenoles comprenden varios grupos de compuestos que se encuentran de forma natural en los alimentos y bebidas de origen vegetal, y la microbiota intestinal los transforma en compuestos más biodisponibles. 

El trabajo, publicado en la revista Cerebral Cortex y liderado por grupos del Instituto Cajal (IC-CSIC) y el Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación (CIAL-CSIC-UAM), indica que los polifenoles de la dieta podrían ejercer efectos beneficiosos modulando la actividad eléctrica de las neuronas de forma directa. Ese efecto de neuroprotección, precisan los científicos, abre la puerta a tratamientos para patologías neurodegenerativas como alzhéimer, párkinson o accidentes cerebro-vasculares.

En frutas y verduras

Un compuesto de la familia de los polifenoles es el ácido protocatéquico, que está en gran variedad de alimentos, sobre todo en frutas y verduras. Sus efectos beneficiosos son conocidos, dicen los científicos, y se han probado en el laboratorio -entre ellos propiedades antioxidantes, anti-inflamatorias, antitumorales, inmunoreguladoras-, además de neuroprotectoras.

Se suponía que estos efectos estaban mediados por una acción en el sistema vascular, regulando el aporte de sangre y nutrientes, o bien directamente sobre las células neurales y sus rutas metabólicas, señala el CSIC. Los investigadores detallan que ambas vías son reflejo directo de la actividad eléctrica de las neuronas, cuya respuesta a los estímulos durante el procesamiento de la información del exterior se puede modular de forma sostenida al alza o a la baja por sustancias neuromoduladoras.

Eso hace que las personas sea más o menos sensibles tanto a estímulos naturales como a condiciones que acaben en daño o disfunción. Estas sustancias son liberadas desde otras células del cerebro o bien desde el propio torrente sanguíneo, procedentes, por ejemplo, de la dieta.

Actividad de las neuronas

Tal y como explica Óscar Herreras, investigador del IC-CSIC, hasta ahora se desconocía si los polifenoles de la dieta podían ejercer efectos beneficiosos modulando la actividad eléctrica de las neuronas de forma directa. "Lo que se ha constatado en este estudio es que el ácido protocatéquico disminuye la capacidad de respuesta eléctrica de las neuronas, es decir, se vuelven más silenciosas", indica.

El hallazgo abre nuevas posibilidades para explicar e incluso tratar algunas enfermedades neurodegenerativas, apuntan los científicos

El hallazgo abre nuevas posibilidades para explicar e incluso tratar algunas enfermedades neurodegenerativas "ya que, por ejemplo, la disminución de actividad eléctrica y, por tanto, del consumo energético de las neuronas, disminuirá la producción de radicales libres y otros agentes pro-inflamatorios, de ahí el efecto neuroprotector", abunda el científico.

Añade que, sin embargo, aún queda mucho por investigar, como conocer con qué facilidad penetran los polifenoles en el cerebro y si sería posible dirigir esta acción protectora a zonas específicas donde sea más necesaria. Los científicos esperan que estos hallazgos impulsen una actuación más decidida para investigar el efecto de componentes de la dieta directamente sobre la actividad eléctrica del cerebro, causa primera de la activación molecular y génica de las neuronas y otras células cerebrales, por un lado, y del comportamiento y sus disfunciones, por otro, zanjan.