ALERTA DE LOS PEDIATRAS

Temor a "una avalancha de citas" por los permisos de cuidados de hijos por causas de "fuerza mayor"

Tres sociedades científicas alertan al Gobierno y solicitan "con toda la urgencia posible" una articulación de esa acreditación del 'motivo de ausencia' que no implique la intervención del sistema sanitario

Un grupo de niñas, junto a un colegio, en un imagen de archivo.

Un grupo de niñas, junto a un colegio, en un imagen de archivo. / EFE

Nieves Salinas

Los pediatras españoles han dirigido una carta a la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, en relación al Real Secreto 5/2023, de 28 de junio que, entre otros aspectos, contempla la aprobación de los nuevos permisos retribuidos para las familias por causas de "fuerza mayor". Los especialistas admiten que "supone un avance y mejoría de los derechos sociales y en la conciliación familiar, y compartimos la intención del legislador", pero discrepan "en la forma en que se debe articular esos derecho".

Los nuevos permisos para facilitar la conciliación y el cuidado de familiares o convivientes entraron en vigor el 30 de junio, junto al permiso remunerado de quince días en caso de registro de pareja de hecho, como existe para los matrimonios. Las medidas fueron incluidas por el Gobierno en el decreto anticrisis aprobado por el Consejo de Ministros. Los permisos estaban previstos en la ley de familias que diseñó el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 y que no pudo tramitarse por la convocatoria electoral.

Causa de fuerza mayor

Según dice el Real Decreto 5/2023, de 28 de junio "la persona trabajadora tendrá derecho a ausentarse del trabajo por causa de fuerza mayor cuando sea necesario por motivos familiares urgentes e imprevisibles, en caso de enfermedad o accidente que hagan indispensable su presencia inmediata". Las personas trabajadoras tendrán derecho a que sean retribuidas las horas de ausencia por las causas previstas en ese presente apartado equivalentes a cuatro días al año, conforme a lo establecido en convenio colectivo o, en su defecto, en acuerdo entre la empresa y la representación legal de las personas trabajadoras aportando estas, en su caso, acreditación del motivo de ausencia.

El decreto "no explica la forma en la que los padres deben acreditar la enfermedad o accidente de sus hijos menores" se quejan los pediatras

Los presidentes de tres asociaciones científicas -el doctor Cristobal Coronel, de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP); el doctor Luis Carlos Blesa, de la Asociación Española de Pediatría (AEP) y la doctora, Concepción Sánchez, de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap)- han firmado un texto en el que, se quejan, el decreto "no explica la forma en la que los padres deben acreditar la enfermedad o accidente de sus hijos menores".

Acreditación médica

En la carta, suponen "que no es precisa una acreditación médica, porque en otro apartado del decreto, para otros fines, sí se afirma que se precisa un informe del servicio de salud, lo que aquí no sucede". Consideran los pediatras que, en estos tipos de ausencias cortas, "el hecho de que el trabajador deba acreditar el motivo de ausencia abre la puerta a que, una vez más, recaiga sobre el médico la petición de certificar que lo que esa persona dice es cierto, cuando la inmensa mayoría de las veces en ese tipo de ausencias cortas será imposible comprobarlo".

Añaden que la exploración física en los procesos leves de corta evolución "suele ser normal o anodina y no permite diferenciar si el niño requiere o no quedarse en casa". La presencia de un mayor o menor malestar, de fiebre, un episodio aislado de vómito, de más o menos deposiciones, más o menos episodios de cefalea (por ejemplo) o su intensidad, que es lo que condiciona el que el paciente deba o no guardar reposo o quedarse al cuidado de los padres en casa, enumeran, "no es objetivable en una consulta médica casi nunca en este tipo de procesos, y el médico solo puede confiar en lo que refieren el paciente o los cuidadores".

Por eso, critican, "una vez más, sería confundir lo que es el acto médico, que no consiste en dar fe de la veracidad de lo que los pacientes refieren, ni justificar la ausencia de uno o ambos tutores de su centro de trabajo, para la observación y cuidado domiciliario de los menores a su cargo, que es la principal recomendación".

Alerta al Gobierno

Por eso, consideran necesario "alertar al Gobierno y solicitar con toda la urgencia posible una articulación de esa acreditación del 'motivo de ausencia' que no implique la intervención del sistema sanitario". Por ejemplo, indican, mediante declaraciones autorresponsables. De lo contrario, auguran, "la avalancha de citas innecesarias y evitables, por patología leve y banal, se van a multiplicar en los servicios de Urgencias y en la Atención Primaria".

Unos servicios, que recuerdan, ya de por sí están "saturados y tensionados y que iría justo en dirección contraria de lo que necesitamos". Añaden que "se trata de un asunto que puede tener un impacto muy negativo en la sobrecarga asistencial y totalmente contrario al necesario avance hacia el autocuidado por parte de la población de las patologías o dolencias leves".