La llegada de la tercera ola y el aumento de contagios por coronavirus ha vuelto a situar el debate en torno a cuál es la mejor mascarilla para protegerse del coronavirus, si las FFP2 o las quirúrgicas.
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La irrupción de la cepa británica y el repunte de contagios tras la Navidad por covid-19 ha
provocado que varios países de Europa tomen nuevas medidas para intentar frenar el número de
casos. Una de esas normas es la obligación de llevar mascarilla FFP2. En concreto, han sido
Alemania y Austria quienes han decidido dar el paso, haciendo su uso obligatorio en espacios
como el bares o supermercados. Además, Francia las ha hecho obligatorias en oficinas y ha
prohibido por completo el uso de mascarillas de tela que filtren menos del 70% de partículas.
El debate llega a España
Estas decisiones han tenido repercusión en España y tanto el presidente de la Xunta de
Galicia, Alberto Núñez-Feijóo, como el de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández
Mañueco, han planteado a Pedro Sánchez y al Ministerio de Sanidad el uso obligatorio de
mascarillas FFP2 en determinados espacios. Además, el presidente de la Junta de Andalucía,
Juanma Moreno, ha solicitado al ejecutivo nacional una rebaja del IVA de estas mascarillas.
¿Cuáles son mejores y qué diferencias hay?
Hay que señalar que la normativa que rige la venta de las mascarillas en España, publicada por el
Ministerio de Consumo, concretamente la especificación UNE 0064, establece que todas las
mascarillas deben de tener una capacidad de filtrado de partículas de, mínimo, un 90%. Además,
el mencionado ministerio ofrece una guía para el uso de las mascarillas.
Mascarilla quirúrgica
La mascarilla quirúrgica ofrece una mayor protección que las mascarillas higiénicas, que son las más utilizadas durante la pandemia de coroanvirus. Tienen una capacidad de filtrado a partir del 90%. Su objetivo es proteger a quienes están alrededor de la persona que la lleva, evitando la dispersión vírica al estornudar, toser o hablar. Son las únicas que actualmente tienen un precio máximo, fijado en 0,96€ por el Ministerio de Consumo, aunque su precio habitual se sitúa en torno a los 60 céntimos.
Su tiempo de vida útil depende del fabricante, aunque no se recomienda un uso de más de 4
horas y no son reutilizables. Pueden tener fecha de caducidad y si se mojan o deterioran, deben
ser sustituidas.
Cabe señalar que en Lucena se fabrican millones de estas mascarillas al año.
Mascarillas quirúrgicas en la fábrica de Effimed en Lucena. (A.J. González)
Mascarilla FFP2
Tiene una capacidad de filtrado mayor al de las quirúrgicas, concretamente superior al 92%, con lo que ofrecen una protección mayor ante posibles contagios. No son reutilizables ni se pueden lavar y su tiempo de útil de uso es de cuatro horas, pero puede proteger hasta ocho. Se deben vender en envases individuales.
Diversos expertos recomiendan que, con el aumento de contagios durante la tercera ola, es
recomendable utilizar este tipo de mascarillas para espacios cerrados donde no se puede
asegurar la distancia de seguridad, especialmente el transporte público. Su precio es mayor al de
las mascarillas quirúrgicas, puesto que está entre los 1,50 y 2€.
Mascarilla FFP2. (Europa Press)
