Existe una relación directa entre el uso del teléfono móvil y el cáncer de cerebro. Así lo estableció ayer, sobre la base de varios peritajes técnicos, el tribunal de Ivrea, ciudad situada entre Milán y Turín. Es la primera vez en el mundo que un tribunal de primera instancia relaciona ambos elementos, por lo que hasta la fecha varios institutos internacionales de investigación sobre tumores habían solo señalado que podía existir «una posibilidad».

El caso dirimido por el tribunal se refería a un trabajador de Telecom Italia, de 57 años, que por razones de oficio tenía que usar el móvil entre tres y cuatro horas al día. La sentencia condena al ente italiano sobre enfermedades laborales a reconocer al trabajador una pensión de invalidez profesional.

En el dispositivo de la sentencia el juez Luca Fadda cita un peritaje técnico ordenado por el tribunal, según el cual el uso del móvil habría causado al trabajador «un neurinoma del sistema acústico, un tumor benigno que provoca invalidez». Los abogados Renato Ambrosio y Safano Bertone, del bufete defensor del trabajor de la operadora telefónica, comentaron que «es la primera vez que la justicia italiana reconoce la total plausibilidad de las consecuencias oncológicas de las ondas electromagnéticas de los móviles».

INFORMAR DE LOS RIESGOS / Dichas consecuencias ya habían sido reconocidas en el 2011 por el Instituto de Investigaciones Oncológicas y en el mismo sentido se habían pronunciado el tribunal de apelación de Brescia, cerca de Milán, y el Supremo italiano. «No quiero transformar el móvil en un diablo, pero sí que se use de una manera consciente», añadió el abogado Bertone, subrayando que si «los tribunales italianos reconocen la causa oncógena comprendida en los campos electromagnéticos generados por los móviles, constituye una señal del progreso continuo de los conocimientos científicos». «Las personas tienen que ser informadas sobre los riesgos», remachó.