El 95 por ciento de los españoles de entre veinticinco y cuarenta años manifiesta su deseo de conservar la sangre de cordón umbilical (SCU) de sus hijos, aunque sólo el 15 por ciento conoce algún banco de almacenamiento. En cuanto a quién tendría que hacerse cargo del coste de este servicio, el 93,5 por ciento es de la opinión de que debería estar cubierto por la Seguridad Social.

Así se desprende de una encuesta realizada por Secuvita, un banco privado de células madre, en la que han participado 1.200 personas de toda España, 740 mujeres y 460 hombres, y que ayer fue presentada en una conferencia de prensa. Pese a que la inmensa mayoría de los interpelados desearía guardar la sangre de sus hijos, como fuente para la obtención de células madre, en España tan sólo 70.000 personas han elegido esta opción desde 2004.

Las células madre de SCU son útiles para el tratamiento de la leucemia y otras enfermedades hematológicas, para patologías cancerígenas y del sistema inmune, y en el campo de la medicina regenerativa, donde las antólogas (propias) son la mejor opción.

El doctor Santiago Luengo, director de Secuvita, ha pormenorizado que España se encuentra en una "isla" legislativa, porque es el único país del mundo en el que se exige que la SCU que se almacene en territorio nacional quede a disposición del sistema público, mientras que en otros lugares continúa siendo en todo momento propiedad del bebé. Actualmente hay 40.000 muestras en bancos privados, el 96% de ellas en el extranjero para evitar esta obligación.