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A PIE DE TIERRA

Desiderio Vaquerizo

Por un nuevo modelo de ciudad (y III)

Es el momento oportuno de crear un marco inter-institucional y a ser posible universitario

Tras cuatro décadas de investigación intensiva en Córdoba y provincia, parece el momento oportuno de rentabilizar el extraordinario volumen de datos conseguido creando un marco inter-institucional, y a ser posible universitario, desde el que ofrecer al resto del mundo un compromiso explícito y sin fisuras frente al que constituye uno de los principales activos de la ciudad: su acervo patrimonial en general, y arqueológico en particular. Un Instituto universitario de Arqueología y Patrimonio, que habría de ser entidad pública e independiente con carácter institucional y personalidad jurídica propia además de centro homologado de investigación, podría actuar como elemento coordinador entre Administración autonómica, Diputación, Ayuntamientos, Museos, Universidad, Colegios Profesionales, empresas, comunidad educativa y colectivos sociales para racionalizar la investigación, la conservación y la puesta en valor de dicho patrimonio; un referente internacional en metodología, gestión, rigor y resultados.

Este Instituto se debería nutrir en esencia de los fondos aportados anualmente por sus patronos, unidos quizás en una Fundación o Consorcio al margen de cualquier criterio o ciclo político y con visos de permanencia. Del mismo modo, podría concurrir a convocatorias autonómicas, nacionales y europeas para la propuesta de proyectos de investigación que contribuirían al mantenimiento de la institución y a la consecución de sus objetivos; también, sumar socios del mundo empresarial o de la ciudadanía relacionados con el patrimonio en sentido amplio y el turismo cultural, a la manera de mecenas. Modelos hay de sobra: basta recordar el Instituto Universitario de Investigación en Arqueología y Patrimonio Histórico creado hace sólo unos años en la Universidad de Alicante (https://inaph.ua.es/). En Córdoba, de entrada y entre otras, tendría como básicas las siguientes funciones: a) investigación científica de campo y de gabinete sobre la realidad patrimonial y arqueológica de la ciudad entendida como yacimiento único -en el espacio y en el tiempo- y su evolución como centro histórico, en el marco de iniciativas de alcance nacional e internacional con los que someter y proyectar los avances conseguidos a la comunidad científica y la sociedad; b) docencia y formación de Investigadores y colectivos diversos (como cuerpos de seguridad especializados en patrimonio, o profesores de otros niveles de enseñanza), con capacidad para gestionar las prácticas asociadas tanto a Grados como a Postgrado, potenciando al tiempo el papel privilegiado de Córdoba como laboratorio vivo; c) acogida de investigadores de otros lugares de Andalucía, España, Europa o el mundo que vengan a trabajar sobre temas relacionados con nuestra identidad o nuestro pasado histórico, o simplemente a especializarse; d) organización de congresos y de encuentros internacionales, de jornadas divulgativas y de puertas abiertas, de visitas a excavaciones y conjuntos patrimoniales, de ciclos de conferencias, seminarios, congresos, exposiciones e incluso, por qué no, de iniciativas muy pensadas y medidas de recreación histórica y apoyo a nuestro legado identitario, reforzando de paso las claves definitorias de nuestra esencia como cultura; e) colaboración con otras Universidades e instituciones encargadas de la investigación, empresas o Administraciones (no sólo españolas), para la puesta en marcha y desarrollo de proyectos, la formación de personal, o la innovación tecnológica y metodológica; f) recuperación, defensa, tutela y puesta en valor de nuestro patrimonio, en aras de un discurso único y transversal de ciudad; g) reversión a la ciudadanía de los resultados de la investigación, entendida dicha premisa como factor definitorio en las relaciones entre universidad y sociedad, que han de ser potenciadas y convertidas en cotidianas, particularmente en el campo de las Humanidades; h) diseño y gestión de una red de Centros de Interpretación Arqueológica y Patrimonial e Itinerarios Culturales con que reforzar el legado del que somos todos responsables, potenciarlo y también transmitirlo, al tiempo que se contribuye a deslocalizar el turismo, etc. Se convertiría así dicho Instituto en el corazón palpitante de nuestra personal idiosincrasia, escaparate ante el mundo y foco cualificado de empleo; un revulsivo social y económico capaz de apostar por la cultura emprendedora y transversal basada por fin, sin complejos, en lo propio; una forma activa de hacer ciudad y poner todos los medios al servicio de un modelo único, de futuro; de optimizar cada acción para que repercuta en crecimiento estructural y ayude a fijar a nuestros jóvenes al territorio mientras defienden lo suyo; de poner la Universidad -uno de los capitales más importantes y de mayor potencialidad con que cuenta Córdoba- al servicio de la educación y la generación de conocimiento, pero también del crecimiento; de imbricar a capital y provincia en el mismo discurso y reconducir esfuerzos en pro de un objetivo común, asumiendo responsabilidades y evitando disensiones o despilfarro de recursos.

*Catedrático de Arqueología de la UCO

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