Esto de la selección de personal es como el famoso «ojo clínico» de esos médicos capaces de detectar de inmediato la enfermedad, o como esos ya poco frecuentes empleados de banca que nada más hablar dos minutos con el cliente sabían si era de fiar. Los informes, los análisis, las tecnologías y los datos son imprescindibles, pero, a la hora de contratar a alguien, el 63% de las empresas asegura que lo determinante es la entrevista personal, según difunde la empresa de recursos humanos Randstad. Un buen seleccionador es capaz de «calar» a la gente, y averiguar enseguida si es la persona idónea para la empresa.