La falta de representación estudiantil en la Universidad de Córdoba es casi mítica. En los últimos años, distintas vicisitudes han provocado que la mayor parte del tiempo el alumnado o no contara con representantes o estos fueran interinos. Este último es el caso actual del Consejo de Estudiantes de la UCO (CEUCO) que se ha pasado el curso intentando renovar sus cargos sin conseguirlo.
Jorge Ortiz fue elegido presidente del CEUCO en noviembre del 2017, después de que su antecesor, José Emilio Carbonell, dimitiera unos meses antes -en mayo- al no sentirse arropado.
Los cargos del CEUCO se eligen por un año, dado el importante desgaste que supone compaginar la representación estudiantil con los estudios. De esta forma, Ortiz debería haber sido sustituido el pasado otoño, y se intentó, pero no se consiguió porque ningún alumno (la UCO tiene matriculados este año casi 18.000 estudiantes) presentó una candidatura.
Tres intentos
Tras esta primera intentona frustrada de renovar los cargos del CEU, se llevó a cabo una segunda convocatoria de elecciones, convocatoria que, como la primera, tampoco consiguió contar con candidatura alguna. Así que, si Mahoma no va a la montaña... Desde el CEU se iniciaron contactos con distintos alumnos con el objetivo de configurar una candidatura y se consiguió. Javier Ruiz Riquelme, estudiante de Química y presidente del club de miembros del Aula de Debate UCO, se presentó a la tercera convocatoria de elecciones, la que debía ser la definitiva, el pasado 23 de abril. Pero no lo fue. Salvado el obstáculo de la falta de candidato, los estudiantes se toparon con el obstáculo del reglamento y sus duras condiciones para la celebración de elecciones.
Jorge Ortiz explica que el reglamento establece que para ganar la votación en primera vuelta el candidato debe obtener la mayoría absoluta de los miembros del pleno del CEU, es decir, 17 votos. Por un solo voto, Ruiz Riquelme no pudo ser elegido nuevo presidente de los estudiantes y hubo de celebrarse una segunda vuelta en donde ni siquiera se alcanzó el quórum necesario (22 miembros) para llevar a cabo la votación. Resultado: Jorge Ortiz sigue siendo presidente en funciones y habrá que esperar al nuevo curso para volver a convocar elecciones, ya que el reglamento establece que en periodo de exámenes (el que se inicia precisamente ahora) no se pueden celebrar eleccciones.
Dificultades
Detrás de todas estas dificultades para elegir representantes hay múltiples motivos. Para empezar, lo habitual es que los candidatos sean alumnos de los últimos cursos de grado, es decir, que además de sus clases, tienen prácticas, lo que ya les supone un importante esfuerzo y bastantes horas de dedicación. La imposibilidad del voto telemático o el alto quórum para la votación también influye, como la falta de reconocimiento de sus compañeros tampoco ayuda y aunque el Estatuto del Estudiante Universitario establece que las universidades facilitarán la labor de los representantes en la práctica no siempre es fácil que se tome en consideración esta labor. De hecho, Jorge Ortiz lamenta que haya representantes que se vean obligados a elegir entre sus obligaciones académicas y la representación por no tener la opción de compatibilizarlas.
Para el vicerrector de Estudiantes y Programas de Movilidad, Alfonso Zamorano, «el CEU se encuentra en una situación inusual en la UCO, pero nada infrecuente si lo comparamos con la situación de la representación en las universidades españolas». No obstante, «los consejos de estudiantes de los centros están trabajando intensamente y el CEU también está coordinando las actividades estudiantiles y todo lo referente a su representación en los órganos correspondientes» y «todo funciona con absoluta normalidad». «Desde el Vicerrectorado estamos muy satisfechos por el trabajo de los consejos de estudiantes y del CEU en funciones.H
