La Universidad de Córdoba acababa el 2019 aprobando sus presupuestos para 2020, unas cuentas que rozan los 174,7 millones de euros, lo que supone un incremento del 5,78% respecto al ejercicio anterior.

A pesar de este aumento, la gerente de la UCO, Luisa Margarita Rancaño, opina que la Universidad de Córdoba «no está bien financiada» y recuerda que «el resto de universidades de nuestro entorno han podido atender las necesidades de financiación con recursos propios en un momento crítico, mientras que la UCO ha necesitado ayuda. Esta situación se produce desde hace tiempo y a grandes rasgos se puede decir que viene motivada por la consideración que se da a la investigación en los modelos de financiación. La investigación es cara y consume muchos recursos que no están financiados. La UCO es principalmente investigadora y tira de las ratios de investigación en Andalucía».

Además esta falta de recursos se pone de manifiesto también en las necesidades de mejora de infraestructuras. «No hablamos de grandes proyectos, simplemente de atender al deterioro de nuestros edificios y nuestras instalaciones. Hacemos mucho con pocos recursos y nuestro presupuesto se ejecuta prácticamente en su totalidad al final del ejercicio», afirma la gerente.

En cualquier caso, recalca Rancaño, «hemos seguido estrictamente las recomendaciones de la Cámara de Cuentas en su informe de fiscalización de las Cuentas de la UCO de 2016 y que se hizo público el último trimestre del año pasado, especialmente las referidas a la RPT (Regulación de Puestos de Trabajo) del PDI (Personal Docente e Investigador), las referidas a control interno, adecuación del presupuesto a la regla de gasto o modificaciones presupuestaria, entre otras».

PERSONAL/ La partida destinada al personal es la que más crece, un 5,74%, debido a la ejecución de los acuerdos adoptados en la Mesa de Negociación de las Universidades, que ha venido a restituir derechos anteriores a la crisis tanto para el PDI como para el de administración y servicios (PAS). «Esto significa que la Financiación Básica Operativa prevista para 2020 (la mayor fuente financiación de las universidades procedente de las transferencias de la Junta de Andalucía, que se ha estimado un crecimiento superior al 6%) se destinará en un 94% a gastos de personal teniendo que atender el resto de gastos de funcionamiento con recursos propios o procedentes de otras fuentes de financiación», explica la gerente, quien aclara que, «no obstante, se ha ido consolidando en los últimos años financiación que ha permitido incrementar también el presupuesto destinado a los objetivos prioritarios de investigación e internacionalización, y en menor medida a atender a las necesidades de nuestras infraestructuras para las que confiamos que existan proyectos de financiación específicos».

Además, la Universidad de Córdoba ejecutará en este año un nuevo Plan de Empleo Joven (2,3 millones), los Planes de Excelencia, Coordinación y Apoyo (3,7 millones), los específicos de apoyo a la Infraestructura Científica con fondos europeos (1,3 millones) o los destinados a Investigación Científica y Recursos Humanos (3,2 millones).

De cara a próximos ejercicios, «el crecimiento va a estar condicionado por la financiación y en este sentido confiamos en que el nuevo Modelo de Financiación de las Universidades presentado a los rectores a finales de 2019 pueda servir para dar cobertura suficiente a sus necesidades docentes e investigadoras dejando de ser de las peor financiadas del sistema», dice Rancaño, que deja claro que la UCO seguirá apostando por la investigación.