Un hombre se entregó ayer a la Guardia Civil tras haber llamado a los servicios de emergencias para informar de que había acabado con la vida de su hijo de nueve años de una puñalada en el núcleo poblacional de Balerma, adscrito al municipio de El Ejido. Los hechos tuvieron lugar antes de las 16,15 horas en el número 61 de la calle del Mar, cerca del paseo marítimo de la localidad costera, si bien el cuerpo sin vida del menor fue levantado poco antes de las 20,00 horas con la llegada de la comitiva judicial.

Los primeros datos del siniestro apuntan que el crimen estaría enmarcado en un presunto parricidio y no en un caso de violencia de género, según las averiguaciones de la Guardia Civil, que aún se mantenía anoche en la zona para esclarecer lo sucedido. El detenido fue conducido hasta el cuartel de la Guardia Civil de Santo Domingo en El Ejido. Hasta el lugar se desplazó un equipo de emergencias sanitario que no pudo hacer nada para salvar la vida del menor y que tuvo que trasladar hasta el Hospital de Poniente a la madre del fallecido y a su hermano, otro menor de 12 años, porque ambos sufrían una severa crisis de ansiedad.

El detenido, de nacionalidad rumana al igual que su esposa, se encontraba en el interior de la vivienda donde fue encontrado el cuerpo del menor, quien al igual que su hermano, había nacido en España. Según los primeros indicios, ni la madre ni el hermano estaban presentes en la casa en el momento de los hechos.

A la espera de esclarecer lo sucedido y de tomar declaración al presunto autor del crimen, los agentes de Policía Judicial inspeccionaron la vivienda para recabar pruebas. Mientras, el titular de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Almería decretó el secreto sobre las actuaciones. La corporación municipal de El Ejido y en su nombre el alcalde, Francisco Góngora, manifestó su «consternación» por el cruel parricidio de un menor de nueve años.