El presidente de la Federación Profesional del Taxi de Madrid, Julio Sanz, aseguró ayer que 128 taxis han sufrido «daños materiales» desde que el sector inició su huelga indefinida hace diez días, y que en la noche del martes «uno de ellos ha sido quemado». Además, alrededor de cien taxistas han sido heridos por «golpes de diversa consideración» en las protestas que, desde el pasado lunes, viene realizando este colectivo, según ha dicho Sanz en una rueda de prensa en la que ha presentado la nueva propuesta sectorial de regulación de los vehículos de transporte con conductor (VTC). Sanz ha comentado que un taxista permanece en coma inducido desde el pasado martes «por el atropello de un coche», y que seis han sido detenidos a lo largo de estos diez días, si bien ya han sido puestos en libertad.

Los profesionales en huelga afrontan unas pérdidas que Sanz estima en unos 170 euros por persona y día, pero señaló que observa más «determinación» que «fragilidad» en sus compañeros, aunque algunos «lo están pasando muy mal», y que no tienen más remedio que persistir en su empeño, porque de lo contrario están «condenados a perderlo todo». Ya preparan una gran manifestación con los colectivos que les apoyan.