Suma y sigue. Ayer murió un nuevo cliclista atropellado en la carretera, un hombre de 43 años que circulaba por la N-420 en Teruel. Pero pudo ser peor. Otro ciclista, Angel Vicioso, que formó parte como profesional de los equipos Kelme, Liberty Seguros o Astaná, fue arrollado en Valencia cuando entrenaba con el triatleta Jesús Gomar. Afortunadamente podrán contarlo. Este suceso tuvo lugar cerca de la N-332, donde ya han muerto cinco ciclistas. ¿Hasta cuándo van a seguir muriendo ciclistas en las carreteras españolas? ¿Cuántas muertes serán necesarias para que nos demos cuenta de que son extremadamente vulnerables y debemos respetar las normas? Tenemos que tomar conciencia de ello si queremos acabar con este grave problema.