Patrick Crusius acaba de matar en El Paso el día 3 de agosto a veinte personas y herido a otras veinte y seis por el hecho de no ser blancos puros. Las tres cuartas partes de esta población son hispanos a los que Patrik odia. Pero Patrick desconoce que El Paso, que ahora alberga una población de 700.000 personas, en 1776 tenía unos cinco mil habitantes que vivían en un espacio bucólico. El Paso, junto a Santa Fe y Alburquerque, son ciudades en las riberas de Río Bravo o Río Grande. Los europeos a los que Patrik tanto dice amar llegaron a El Paso antes de 1680. Según el marqués de Rubí en 1776 «la tierra de El Paso estaba muy bien cultivada y cualquier cosa que en ella se plantara crecería. Especialmente buenas viñas que rivalizan con las de España y gran abundancia de frutas europeas que con frecuencia dejaban pudrir en los árboles. Hacían vino de buena calidad y mejor grapa; sin embargo no cosechan suficiente maíz para sus necesidades pues gran parte del suelo está plantado de vides». Debiera saber este asesino que la mayor parte de aquellos labradores eran criollos hispanos. Y que se defendían de los ataques de los apaches.
Este Patrik, loco asesino, es un ignorante que reconoce su odio a los hispanos. Y debiera saber que la primera misión en El Paso se situó años antes de 1680 con colonos procedentes de Santa Fe que estaban instalados desde 1609. La misión se fundó en El Paso en Corpus Christi de la Isleta en Río Grande. El Paso era en 1693 capital y residencial del gobernador, quien requirió que se instalaran colonos españoles por su capacidad de criar vacas, ovejas y caballos. De modo que setenta años de presencia española en El Paso dejaron impronta en las gentes del Valle de Río Grande.
Este hombre tan xenófobo se alegraría si supiera que en 1662 el padre Fray Alonso de Posada pasó dos semanas en El Paso a donde llegó desde Santa Fe para someter a juicio a Bernardo López de Mendizábal, nuevo gobernador del Territorio, y le embargó sus bienes por mandato de la Inquisición.
Patrik considera invasores a estos hispanos que llevan allí cuatro siglos. Olvida que en 1778 los españoles emplearon hombres y dineros para luchar contra los Hopi y los indios de las llanuras que estaban armados por traficantes franceses. Y que mantuvieron a raya a Comanches, Navajos y Apaches. Luego se cedieron estos territorios por España y más tarde por México a los Estados Unidos de América. El virus del racismo y la xenofobia ha penetrado en la mente de Patrick Crusius quien solo conoce la historia desde que México cedió el territorio de Nuevo México y Arizona a Washington.
* Catedrático emérito de la UCO
