El Ricardo III de la tragedia de Shakespeare grita, cuando se ve solo en el campo de batalla: «Un caballo, un caballo, ¡mi reino por un caballo!». Su voz desesperada, adaptada a la situación del mercado laboral actual, sería la de ese 70% de los trabajadores andaluces que tienen problemas para conciliar la vida familiar y laboral. Seguro que muchos, y, sobre todo, muchas (pues entre las mujeres que son madres el porcentaje de disgusto se eleva al 82%), gritarían con gusto eso de «¡Mi reino por un buen horario!». Un informe de la empresa de recursos humanos Adecco señala que la mayoría querría flexibilidad horaria o jornada intensiva, por encima incluso de mejoras en el salario. Ojalá tengan más suerte que el rey británico destronado.