El último día del pasado mes de febrero moría en Madrid el andaluz, de Granada, activista y estadista de la república, como él se auto intitulaba, Antonio García-Trevijano Forte, jurista, notario, escritor y profesor universitario de cultura enciclopédica, considerado por la editorial académica University Press of America destacada figura de la política española, desde finales de los años sesenta, así como uno de los intelectuales en teoría política y estética más distinguidos del siglo XX, encontrándose esas sus obras adscritas a las europeas modernas en la Biblioteca del Congreso de los EEUU.
En 1974 fue impulsor, coordinador y redactor de la trascendente, relevante y antifranquista Junta Democrática, como algo después presidente de la denominada Platajunta, entidad que unió en un solo grupo al conjunto de la oposición al régimen de la dictadura, pero que abandonó al imponerse en el subsiguiente proceso de la transición política la reforma frente a la ruptura por la que denodadamente abogaba, al igual que por la restauración republicana, incluida la previa libertad constituyente, abominando rotundamente de los separatistas, si bien, no obstante, acabaría estableciendo, de la mano de cualificados miembros del Opus Dei, una relación de amistad y asesoramiento con don Juan de Borbón, residente en la portuguesa Estoril. Lo que no le impidió, ya en 2006, fundar y presidir el Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional; tozudo siempre, batallando por sus destacados y explicitados ideales.
Por todo ello, el avatar humano e institucional del personaje recientemente fallecido es, y ha sido, ciertamente conocido, tanto como en buena medida tendenciosamente ignorado, por determinados medios, públicos y privados, y adjuntos círculos de poder, habida cuenta de los postulados políticos, de los que el citado se consideraba empecinado adalid, que chocaban o se enfrentaban con los que defendían, y defienden, otros sectores establecidos, sobre todo por los firmemente asentados en cuanto al reparto del pastel se refiere. Descanse en paz.
* Doctor ingeniero agrónomo. Licenciado en Derecho
