Llegaron a Valencia hace unos meses y su alegría se va extendiendo poco a poco. Son las religiosas del instituto Jesu Communio. Su hábito vaquero, su gran número -ya son 83 en el convento de Godella-, su juventud y sus caras siempre sonrientes las hacen inconfundibles. Ahora, que ya están definitivamente instaladas en Godella, abren su casa para grupos de jóvenes, de colegios, de parroquias, de movimientos, de asociaciones o de familias que quieran tener un encuentro con ellas en su locutorio o compartir la celebración de la liturgia. Y es que esos encuentros y la sala donde tienen lugar también son algo muy particular y característico de estas religiosas. El locutorio es una estancia grande con capacidad para acoger a unas 150 personas, además de las 83 religiosas. Mientras que las visitas se sientan en unos bancos, ellas lo hacen en una especie de gradas para que los asistentes puedan verlas a todas. Hace unos días, el pasado 26 de enero, tuvo lugar el último encuentro, coincidiendo con la entrada en la comunidad de una joven valenciana, Carmen, de 19 años, que fue acompañada por su familia, sus amigos y numerosos conocidos que quisieron compartir con ella este paso. Ese día, el locutorio estaba completamente lleno. El objetivo de esos encuentros es compartir la vida y la fe. La conversación surge espontáneamente, sin que haya ningún tema preparado de antemano. En ocasiones, si el grupo es de jóvenes, la reunión comienza con algún video sobre el evangelio, que ya da pie a cantar alguna canción o establecer alguna dinámica. La imagen de las 83 chicas durante estos encuentros es impresionante. Ellas, sonrientes y felices, ofrecen el testimonio de sus vidas, de su encuentro con Cristo, y cuentan cómo surgió su vocación, cómo puede haber chicas tan jóvenes viviendo así, si tienen dudas, cómo vivir la fe en las tareas diarias o por qué llevan hábito vaquero. Valga la noticia y la imagen de las 83 chicas de Godella, como contrapunto de paz y de ilusión, frente a tantas noticias dolientes como nos envuelven. Y nos hacen sufrir.

* Sacerdote y periodista