El Pleno de la Corporación, a instancias del Partido Popular, dio luz verde a la creación de una comisión informativa especial dirigida a evaluar la gestión del servicio de agua en la localidad, tras la avería que tuvo lugar a finales de julio y que provocó un corte en el suministro de cuatro días.

La medida, que se planteó con carácter de urgencia en el Pleno del pasado mes de agosto -si bien entonces no contó con el apoyo de PSOE e IU a la espera de contar con informes técnicos-, pretende evaluar la «gestión política» desde la detección de la avería y su solución definitiva, así como «establecer un plan de actuación que evite que el suministro se suspenda durante tantos días».

La concejala popular Cristina Alguacil aseguró que si bien una incidencia de este tipo «no es responsabilidad de nadie», la creación de esta comisión «permitirá conocer qué soluciones se deben ofrecer en el futuro ante situaciones similares gracias a la evaluación de la gestión realizada».

Por su parte, desde IU se planteó que, junto a la evaluación de la gestión de la avería del pasado mes de julio, «el Ayuntamiento debe establecer las prioridades que respondan a los intereses de los ciudadanos tanto en la red de abastecimiento, como en el saneamiento y la depuración», apuntó la edil Luisa Rodas, para quien «el Consistorio debe defender ante la empresa estas prioridades, si bien debe actuar teniendo en cuenta sus recomendaciones». Un objetivo compartido de forma unánime por el resto de los grupos municipales, que coincidieron en la necesidad de evaluar la gestión de la avería para establecer «prioridades» en la mejora de este servicio.