La Comisión Territorial de Urbanismo de la Delegación de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio aprobó el pasado mes de octubre las últimas subsanaciones del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Montilla tras siete años de trámites. Este documento, que fue gestado hace más de tres lustros, supondrá «un punto de inflexión en el desarrollo de la ciudad», en palabras del alcalde, Rafael Llamas.

La delegada de Fomento, Cristina Casanueva, señaló que con el expediente de aprobación del PGOU de Montilla, quedan definitivamente resueltos todos los reparos del acuerdo de marzo del 2012 y diciembre del 2019, y se aclaran cinco errores materiales que contenía el documento desde la propia resolución, que serán corregidos en el texto refundido previsto por el Ayuntamiento y requerido por la Comisión en el primer acuerdo.

Fue el pasado mes de diciembre cuando el Pleno del Ayuntamiento dio luz verde al último borrador del futuro PGOU, un documento «estratégico y fundamental» para la ciudad que, como recordó Rafael Llamas, fue iniciado en el 2004 y presentado por primera vez a la Junta de Andalucía en el 2012. «Con la aprobación definitiva del PGOU, Montilla se enfrentará a la adaptación de este documento a la nueva realidad», avanzó el primer edil.