Cuando me comunico con mi interior oigo: alza tu mirada hasta cubrirla de verdad, porque la verdad duele, siempre duele. Levanta la cabeza hasta vestirla de realidad, porque la realidad duele, siempre duele. Iza tu cuerpo hasta encontrar tu legitimidad, tu veracidad, tu autenticidad, porque a pesar de ello, aunque la encuentres, sentirás dolor, porque todo el camino recorrido produce dolor, siempre dolor. Si anhelas un futuro, trabaja por él, pero con dolor, porque las metas se consiguen con dolor.

Pero... Hay una cosa que tengo clara, y que no es otra que el respeto personal de uno mismo como la primera condición sine qua non de la búsqueda de una vida digna y plena.Una persona, en mi humilde opinión, que no tenga el máximo respeto por ella misma, es incapaz de mostrar querencia alguna por sus semejantes.

Conclusión: celebremos el Día Mundial de la Concienciación del Autismo como un acontecimiento único, magnánimo, esperanzador; como una realidad palpable, a sabiendas de que la sociedad necesita su completo conocimiento. Pero, no debe quedar aquí, no. Hay que ir más allá. Un día, una celebración y ya está. Suele ser siempre así, por desgracia.

Es por ello, que hay que asistir al ignorante, al desconocedor, al indiferente; y a todo aquel grupo, comunidad, partido, colectividad que desecha e ignora lo que representa en la actualidad la palabra autismo. La batalla aún no hay terminado porque ahora viene la más ardua tarea que los afectados debemos llevar a cabo: la reeducación, asimilación, y aceptación, por parte de la sociedad, de esa concienciación que, no solo celebraremos mañana por motivo conmemorativo, sino que tenemos la obligación de trabajarla día a día, con determinación constante, hasta penetrar en esas mentes ignotas del problema para a posteriori llevar a cabo un conocimiento lo más completo posible de nuestra realidad social. Ayudémonos nosotros mismos a convivir con nuestra realidad. Ayudemos a los demás a sentir, comprender y asimilar nuestra realidad. Ayudemos a romper las barreras del Autismo. Día 2 de abril. Día Mundial de la Concienciación del Autismo.