Voluntarios de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) en Córdoba desarrollaron ayer en la piscina del club Santuario una campaña contra el cáncer de piel, en la que se informó y aconsejó a los bañistas de la necesidad de utilizar fotoprotectores, con un factor mínimo de 30 o mejor de 50, para evitar los efectos nocivos en la salud de broncearse demasiado. Estos voluntarios realizaron una iniciativa similar la semana pasada en una mesa informativa en el centro de la ciudad. Los representantes de la AECC en Córdoba repartieron en la citada piscina folletos y cremas de protección solar, como principal arma para prevenir enfermedades de la piel, entre ellas el cáncer cutáneo, cáncer que además pasa mucho tiempo siendo asintomático. Dichos voluntarios insistieron sobre todo en la importancia de que los niños usen cremas de protección solar con alta graduación, «ya que la piel tiene memoria y con el paso de los años pueden aparecer lesiones por el acúmulo de demasiadas horas de sol, principalmente durante exposiciones en las horas más perjudiciales, como son entre las 12.00 y las 18.00 horas en los días de verano», expuso Pilar Iglesias, portavoz de esta asociación.
La AECC recordó la conveniencia de pasar revisiones del dermatólogo o médico de familia para descartar que cualquier posible lunar o mancha esté relacionado con un posible tumor cutáneo y acudir al especialista si encuentra en los lunares asimetría, bordes irregulares, colores variados, un diámetro superior a 6 milímetros y variación en 4 meses.
