El súbito arranque de la precampaña de las elecciones generales recién anunciadas por Pedro Sánchez refleja una fotografía endemoniada: ni las izquierdas ni las derechas tendrían asegurada la gobernabilidad de España, pero el bloque conservador estaría más cerca de recuperar el poder. La arriesgada jugada del presidente del Gobierno propiciaría la victoria del PSOE el 28 de abril, pero el desplome de su socio natural, Unidos Podemos, sumado al empuje de Ciudadanos y de la extrema derecha de Vox podrían obligarle a hacer las maletas y ceder la Moncloa a Pablo Casado. No obstante, esa triple derecha también se vería obligada a buscar un cuarto socio que aceptase el lastre de pactar con los ultras. Difícil no, lo siguiente.

Según la encuesta preelectoral del Gabinete de Estudios Sociales y Opinión Pública (GESOP) para los periódicos del Grupo Zeta, efectuada a partir de 1.000 entrevistas del 13 al 15 de febrero, Sánchez parte con una holgada ventaja sobre Casado y se llevaría el triunfo en las urnas con 115-117 escaños. Los 32 diputados que ganaría respecto a las legislativas del 2016 se los arrebataría a la coalición de Pablo Iglesias, que se precipitaría de 71 a 36-39 parlamentarios. La alianza que aupó al líder del PSOE al Gobierno hace ocho meses vía moción de censura quedaría en el aire, porque a socialistas y podemistas les faltarían una veintena de escaños para alcanzar la mayoría absoluta. Y 20 representantes es lo que sumarían las dos fuerzas independentistas catalanas con las que Sánchez acaba de romper amarras, ERC y PDECat.

En el otro lado de la balanza, Casado se daría un batacazo mayor que el de Iglesias, pues podría ceder hasta 62 de los 137 diputados que logró Mariano Rajoy en el 2016. El PP obtendría 75-77 escaños y repartiría sus pérdidas entre Ciudadanos y Vox. El partido de Albert Rivera se impulsaría de 32 a 44-47 parlamentarios, mientras que los ultraderechistas de Santiago Abascal irrumpirían en el Congreso con una fuerza determinante: 43-46 representantes. Es decir, Vox podría ser la tercera fuerza del Congreso en número de escaños, aunque sería la cuarta en intención directa de voto (el voto sin 'cocina') y la quinta en voto estimado. Las tres derechas sumarían entre 162 y 170 diputados, por lo que Casado también necesitaría de otros aliados para ser investido presidente.

Ficha técnica

-Técnica: entrevistas telefónicas y presenciales asistidas por ordenador.

-Ámbito territorial: España.

-Universo: población de 18 y más años con derecho de voto.

-Número de entrevistas: 1.000.

-Tipo de muestreo: Estratificado por comunidad autónoma y dimensión de municipio.

-Error de la muestra: +/- 3,1% para un nivel de confianza del 95,0% y p=q=0,5.

-Trabajo de campo: del 13 al 15 de febrero del 2019.