La gestión del Gobierno de Pedro Sánchez de la crisis sanitaria del coronavirus divide a la calle, según los datos que arroja el barómetro de mayo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). El 48,4% de los españoles tiene poca o ninguna confianza en el manejo del Ejecutivo ante el coronavirus, una cifra superior a al 46% que tiene mucha o bastante confianza en Moncloa. Por último, un 74,9% creen que la oposición tiene que colaborar y dejar las críticas para otro momento.

El sondeo muestra esta fractura social, y aunque sigue siendo mayoría la que piensa que el Ejecutivo central debe ser el que tome las medidas, ese porcentaje ha descendido al 55,9% -frente al 73,3 que lo pensaba en abril-, mientras que un 36,6 cree que lo deberían hacer los gobiernos autonómicos. La preocupación ciudadana por el coronavirus ha descendido, aunque se mantiene como el principal problema, seguido del paro y del mal comportamiento de los políticos, que sube al tercer puesto.

El sondeo, realizado por teléfono entre los pasados 4 y 13 de mayo, señala que para el 26,1% la pandemia es el principal problema que existe en España, un porcentaje muy inferior al 49,3% de hace un mes. La encuesta añade una pregunta sobre el ingreso mínimo vital que va a aprobar próximamente el Ejecutivo, y el 83,4% está a favor de que se apruebe este ingreso para las personas más necesitadas, frente a un 12,4% que está en contra.

Caída del PP y amplía la ventaja del PSOE

El barómetro mantiene al PSOE en cabeza en estimación de voto, con un respaldo del 31,1%, e incluso amplía la ventaja sobre el PP ya que señala una caída de un punto de los 'populares', que ahora están en el 20,3%. También bajan Vox, que registra un 11,3%. y Unidas Podemos, que pasa al 11,5%, mientras que sube Ciudadanos hasta el 10,5%.

Esta tarde, José Félix Tezanos, el presidente de este instituto público, comparece en el Congreso para rendir cuentas tras la polémica de la pregunta sobre bulos y prensa, muy criticada por la oposición.

El trabajo de campo de este sondeo se realizó los primeros diez días del mes y mediante 3.000 llamadas telefónicas, un sistema al que el CIS ya tuvo que recurrir en marzo por el confinamiento del covid-19. Al no contar con la estructura necesaria para esta labor, el instituto público contrató de emergencia a la empresa Intercampo, con la que ya había trabajado Tezanos para encuestas de la Fundación Sistema, que también preside. Para sufragar ese contrato extra, el Consejo de Ministros acordó un gasto de 90.000 euros destinado a cubrir las labores necesarias para los barómetros de abril y mayo.

Tezanos frente al espejo

El anterior sondeo generó polémica una pregunta que abría la puerta a restringir la libertad de información para atajar los bulos sobre el coronavirus.

"¿Cree usted que en estos momentos habría que prohibir la difusión de bulos e informaciones engañosas y poco fundamentadas por la redes y los medios de comunicación social, remitiendo toda la información sobre la pandemia a fuentes oficiales, o cree que hay que mantener libertad total para la difusión de noticias e informaciones?", planteaba.

El PP, Vox y Ciudadanos alzaron la voz, acusando al ejecutivo de coalición de PSOE y Podemos de querer "poner un bozal" a la libertad de expresión. Entonces, los socios de gobierno consiguieron esquivar la petición de los populares de que el responsable del CIS acudiera de inmediato a la Carrera de San Jerónimo, esgrimiendo que la edad del sociólogo (73 años) lo desaconsejaba, al ser miembro de un grupo de riesgo del covid-19.

La decisión acabó en la Comisión Constitucional y, ante la presión de la oposición el pleno, el PSOE se comprometió a que Tezanos compareciera. Este martes será el día de las explicaciones.