El IES Santa Rosa de Lima ha sido galardonado con el segundo premio a la Promoción de la Cultura de Paz y la Convivencia Escolar, galardón que ha compartido con el IES Alyanub, de Vera (Almería). El premio cuenta con una dotación económica que asciende a 3.000 euros a repartir entre los dos centros educativos.
«Este galardón supone un reconocimiento a un trabajo de años en el que se ha implicado toda la comunidad educativa. Es, además, un incentivo para seguir trabajando en la misma línea y un reto para continuar mejorando», afirma Carlos Arrabal, jefe de estudios del IES Santa Rosa de Lima.
Desde su primera edición en el año 2010, han sido 51 los centros educativos sostenidos con fondos públicos distinguidos con estos galardones. Los premiados aportan buenas prácticas educativas en el ámbito de la convivencia e igualdad, que se difunden a toda la comunidad educativa y se configuran como modelos para aplicar en los planes de convivencia de los centros.
En este sentido, entre las actuaciones y estrategias puestas en marcha en el IES Santa Rosa de Lima, destaca la creación de un programa informático de gestión de la convivencia, hecho a medida para ajustarse a las necesidades del centro educativo, y una Comisión de convivencia permanente que se reúne al menos una vez en semana para analizar y evaluar la situación con el objetivo final de impulsar medidas.
Asímismo, se realizan actuaciones de sensibilización, como la campaña contra la violencia de género, campaña de patrullas verdes, campaña de prevención del acoso escolar, camapaña de sinsibilización sobre transexualidad o la campaña de sensibilización sobre discapacidad. Todas estas actividades se desarrollan a través del trabajo directo en el aula o en las tutorías, con el fin de informar y concienciar al alumnado para que forme parte activa en el fomento de la convivencia en el centro, como alumnado mediador en los conflictos, o como integrantes de las patrullas verdes, que velan por el cuidado y la limpieza en el patio durante recreos, entre otras actividades.
La clave del éxito en las prácticas para fomentar la convivencia «está en la contextualización, es deicr, el conocimiento de nuestro alumnado, sus características y necesidades y las de su entorno para adaptar el trabajo de convivencia a ello. Esto es fundamental para la efectividad de las campañas», afirma Carlos Arrabal.
