Alrededor de 2.000 personas participaron ayer en una concentración reivindicativa convocada por el comité de empresa de la factoría de Moulinex en Barbastro (Huesca) en defensa del mantenimiento del empleo en la industria y contra un plan de ajuste que prevé un total de 150 despidos.

Los participantes, entre los que se encontraban el alcalde de Barbastro, Antonio Cosculluela, y distintos líderes políticos de la comarca, se desplazaron desde una céntrica calle de la población hasta la plaza del Consistorio, donde se leyó un comunicado de rechazo a las medidas de ajuste previstas.

El manifiesto responsabiliza al grupo francés Seb, propietario de la marca Moulinex, de concentrar el plan de ajuste en la planta de Barbastro a pesar de que es la más rentable de la sociedad en España dado su nivel de eficiencia, la duración de la jornada laboral y los salarios percibidos.